Aquí me tenéis de nuevo, entre la cebada que despunta. Así la veremos en breve en nuestros campos...
Me permito abrir una veda con vuestro permiso. Quiero decir, que como cada uno de nosotros tiene mucho guardado, porqué no compartirlo. Me comprometo a recopilarlo y hacer un cuadernillo que os entregaré on mucho gusto para tener un recuerdo de nuestro paso por este nuestro banco. ¿Qué os parece?...
Arranco con el mejor de todos los sentimientos que una persona puede albergar (al menos para mí), y que, por supuesto, os dedico...
LA AMISTAD
Te cruzaste en mi camino de puntillas,
Sin apenas ruido.
Siento el calor de tu mirada aún en la distancia.
El susurro de tus amables palabras aún no pronunciadas
alcanzaron mis oídos, así, de puntillas, sin apenas ruido.
Imagino la ternura de tus manos acariciando bellos recuerdos,
Esos que no volverán pero que acompañan de por vida.
Veo un rostro apacible que sonríe cuando mira,
Y una mente lúcida y clara que todo lo adivina.
Te espero impaciente cada día,
Y cuando llegas,
los malos vientos se apaciguan,
El cielo se despeja y
los rayos de sol atraviesan mi piel entonces relajada,
penetrando el calor de tus palabras por mis poros,
que llegan así, de puntillas,
sin apenas ruido,
y, como si de un juego se tratara, las estrujo y saco su jugo
alimentando así mi espíritu con la bondad de tu alma.
Como se adhiere la hiedra a un muro de piedra
Moldeando su silueta,
Así te enredaste tú abrazando mi alma,
Alimentando con tu sabia mi sangre ya depurada y enriquecida.
Allá donde estemos una y otra, seremos la misma hiedra
Alimentándonos de la misma tierra.
La escribí hace tiempo pero la amistad es atemporal y al igual que el verdadero amor, permanece.
¡Feliz día!
Me permito abrir una veda con vuestro permiso. Quiero decir, que como cada uno de nosotros tiene mucho guardado, porqué no compartirlo. Me comprometo a recopilarlo y hacer un cuadernillo que os entregaré on mucho gusto para tener un recuerdo de nuestro paso por este nuestro banco. ¿Qué os parece?...
Arranco con el mejor de todos los sentimientos que una persona puede albergar (al menos para mí), y que, por supuesto, os dedico...
LA AMISTAD
Te cruzaste en mi camino de puntillas,
Sin apenas ruido.
Siento el calor de tu mirada aún en la distancia.
El susurro de tus amables palabras aún no pronunciadas
alcanzaron mis oídos, así, de puntillas, sin apenas ruido.
Imagino la ternura de tus manos acariciando bellos recuerdos,
Esos que no volverán pero que acompañan de por vida.
Veo un rostro apacible que sonríe cuando mira,
Y una mente lúcida y clara que todo lo adivina.
Te espero impaciente cada día,
Y cuando llegas,
los malos vientos se apaciguan,
El cielo se despeja y
los rayos de sol atraviesan mi piel entonces relajada,
penetrando el calor de tus palabras por mis poros,
que llegan así, de puntillas,
sin apenas ruido,
y, como si de un juego se tratara, las estrujo y saco su jugo
alimentando así mi espíritu con la bondad de tu alma.
Como se adhiere la hiedra a un muro de piedra
Moldeando su silueta,
Así te enredaste tú abrazando mi alma,
Alimentando con tu sabia mi sangre ya depurada y enriquecida.
Allá donde estemos una y otra, seremos la misma hiedra
Alimentándonos de la misma tierra.
La escribí hace tiempo pero la amistad es atemporal y al igual que el verdadero amor, permanece.
¡Feliz día!