Por lo que yo sé, quizás el plato más genuinamente nuestro sean las piñas de
carnaval. Cuatro ingredientes: huevo, aceite, miel y harina. He visto algo parecido por
Extremadura y en
Ávila. Tiene toda la pinta de ser de origen moro. Ese modo de presentarlo, adornado de
almendras peladillas y en forma de cono o piña, es algo muy del
pueblo. Sorprende que no lo conozcan ni en los
pueblos limítrofes. Elaborarlo tiene su ciencia y su paciencia, pero el resultado es magnífico. Me gustaría que alguien se
... (ver texto completo)