Con ser grave la sequía más grave es que con el lujo que supone tener un
río muy pocas personas se hayan preocupado de cuidarlo, a él y a los
monumentos por los que discurre. Este
puente es precioso, lleno de
historia "revolucionaria". No merece tener un lecho de cemento y un
paseo donde se hace botellón, se rompen los vidrios y demás.