Gracias Susi. Gracias Gala. Gracias a todos aquellos que leéis y valoráis el trabajo que los que como yo intentamos difundir para que no quede en el olvido. Gracias a ese reconocimiento moral que a veces nos hace falta y que, desgraciadamente, no recibimos de autoridades y de gran parte de la población en general.
Veo que este foro se está animando y ya no se habla de botellones y de las muy degeneradas fiestas de agosto en que hemos convertido los “homo-urbanitas”, la mayoría hijos del pueblo, la fiesta de La Virgen y San Roque, a falta de un orden público establecido y en detrimento de un turismo más permanente, de calidad y fiel a sus principios (turistas y personas dispuestas a establecer su segunda residencia, que buscan escuchar el silencio, disfrutar de la naturaleza que nos brinda el Valle del Cabriel).
Una cosa son las verbenas hasta el amanecer y otra cosa es convertir el pueblo en una discoteca versus discoteca 2008 de ciudad (con todos sus vicios y desmanes y con menores por medio). Soy de la “generación de los 80” y he vivido cómo fue engullida por “la ruta del bacalao” autofagocitándose de sus vicios y desmanes. Lo que era libertad se convirtió en libertinaje.
Gracias a “Pueblos de España” por frenar este tipo de mensajes que no dan muy buena publicidad a estos pueblos y desde aquí quiero transmitiros que fuera del mes de agosto, Enguídanos y el resto del Valle del Cabriel son lugares fantásticos donde disfrutar de la cultura (de la geología y la historia), de la naturaleza (por senderos increíbles, de más de 700 especies de plantas de vegetación Mediterránea que han desaparecido de la mayor parte del territorio levantino).
Si algo tiene Enguídanos y casi nadie ha reparado es que es el único pueblo de Cuenca que tiene un microclima mediterráneo-continental con muy pocas diferencias con el clima de la costa de Valencia (afortunadamente menos húmedo y algo más frío en invierno por ser serrano). Esto también ha favorecido la convivencia en el término de
De varios tipos de paisaje totalmente diferentes y con una riqueza botánica inmensurable y de un gran valor ecológico, pulmón para el resto del Levante desertizado. Todo esto es lo que hay que proteger.
Si algo tienen estos pueblos es poder viajar por la historia viviéndola con el paisaje. Intocables por la gran vorágine urbanística estos pueblos mantienen caminos y senderos de hace miles de años, yacimientos históricos de hasta más de 3.000 años, o sus ruinas en el peor de los casos. Todo esto es lo que hay que proteger.
Deberíamos estar agradecidos por un río Cabriel que nos ha horadado estratos de hasta más de 200 millones de años y nos ha puesto al alcance la capacidad de andar por fondos marinos con sus fósiles petrificados del secundario, aragonitos y jacintos de Compostela del Triásico (cristalizados cuando aparecían los primeros dinosaurios), y viajar desde el momentos actual, era por era a los albores de la aparición de la vida vertebrada caminando sobre la tierra (que no en la Tierra). Todo esto es lo que hay que proteger.
Gracias de nuevo a “Pueblos de España” por enriquecer a la web con este foro.
Quizás ya estemos creando ese foro del Valle del Cabriel y no nos hayamos dado cuenta. Se me ha ocurrido que podíamos colaborar en enriquecer de contenido todas las páginas de los pueblos del Valle del Cabriel (Narboneta, Henarejos, Víllora, Mira, Cardenete, Villar del Humo, Boniches, Camporrobles, Villargordo del Cabriel, Venta del Moro, Minglanilla, Iniesta, etc.) y a ver si alguien se anima a colaborar.
Hace cinco años que inicié esta “cruzada” cultural. Hasta ese momento sólo disfrutaba de mis conocimientos y descubrimientos, como mi familia y con mis verdaderos amigos. Bueno, me voy a sincerar un poco.
Tengo 45 años y soy hijo del pueblo (de Enguídanos). Mis antepasados o son directos del pueblo o provienen de Mira, Paracuellos de la Vega o Carboneras del Guadazón. Mis antepasados también se extendieron a Boniches, y a los pueblos de alrededor de Enguídanos. Aunque no conserve el apellido soy Luján por los dos costados (el paterno, y el materno), soy “CasasNuevas”, soy “Diablo”, soy “Llorón”, soy “Gazpacho”. Todo esto es lo que hay que proteger.
Como habréis imaginado nací y vivo en Valencia pero nunca he perdido mi identidad. Mi trabajo es, ante todo, un homenaje a mis padres que emigraron y gracias a los cuales pude recibir una cultura que a ellos les fue negada, a todos mis antepasados cuya curiosidad heredé y que me han enseñado a ir descubriendo la verdadera esencia del ser humano y a amar y respetar aquello por hemos sobrevivido más de 6,5 millones de años y hemos podido realizar nuestra particular revolución tecnológica: la Naturaleza.
Hace cinco años reflexioné sobre varias cuestiones:
- Estamos de paso, qué pinto yo en esta Historia, cuál es el sentido de la vida, y todas esas cuestiones que más de uno nos plantemos en algún momento de nuestra existencia.
- Qué iba pasar con todo lo que había redescubierto, con todos los conocimientos adquiridos y que tan feliz me habían hecho. Era evidente que si no los transmitía quedarían en el olvido.
- Qué iba pasar con el Valle del Cabriel unas cuantas generaciones posteriores. Es evidente: la población desaparecería. Como mucho algunas segundas residencias que a falta de población permanente y de servicios, también acabarían por desaparecer.
Fue entonces cuando decidí colaborar con la dinamización del Valle del Cabriel (el Cabriel era mi segundo gran amor y tenía muchos conocimientos que ofrecer).
Así es como me puse en contacto con el alcalde y así es como me decidí a dar mi primera conferencia de historia coincidiendo con el 450 aniversario de la obtención del Villazgo de Enguídanos de la que ni siquiera en Ayuntamiento tenía conciencia (y que “Pueblos de España”, voluntariamente, me ha dignado introduciéndola en la Historia de Enguídanos). Así llego la segunda: “Historia Geológica del Valle del Cabriel”, y un mural de 12 metros que elaboré íntegramente sobre el mismo tema, que tímidamente firmé sobre las láminas y que levantó una herida en mi interior. Sirvió para que políticos se hicieran una foto junto al mismo (en la que no aparece el autor), y a que la autoría de dicho mural apareciese como de ADIMAN, que se limitó a hacer la obra y a contratar un ceramista reconocido de Manises (Valencia) para pintar mi diseño, y una agencia de publicidad para que imprimiese los “plotters” con los diseños elaborados por mi y que sólo retocaron la imagen central. Ninguna referencia se ha hecho sobre mi autoría en este trabajo en estos boletines. Ni siquiera un reconocimiento.
Además de amar la Cultura, también manejo bastante el diseño gráfico. Mi trabajo no sería posible sin estos conocimientos.
Con respecto al mural nunca pensé en cobrar nada por ello pues fue pensado como un regalo cultural para Enguídanos, para el pueblo. De hecho, nunca cobré nada por ello. Ni por ello, ni por ninguna de las Conferencias que en el pueblo he dado.
Aún así, me decidí a dar mi tercera conferencia (casi 250 páginas de Power Point) sobre “El Valle del Cabriel: Umbral de la Celtiberia”. Mi cruzada es contra la incultura y a favor de la conservación que la Tierra y nuestros antepasados nos han legado, no contra la Política.
Por cierto, las conferencias las tenéis a vuestra disposición cuando queráis (fotografía, mapas, y dibujos), inclusive.
Lo del libro… “estoy en ello”. Podría haber publicado ya uno simplemente con las Conferencias pero mi intención es como manifesté en última conferencia era ampliar la información incluyendo el resto del Valle del Cabriel. Sólo un Cabriel unido puede que esto siga adelante. Sólo ofreciendo toda la riqueza natural y cultural del Valle del Cabriel se puede dinamizar el mismo. Juntos tenemos mucho que ofrecer.
Y qué es lo que tengo en la recámara:
- Muchos “gigas” de bibliografía sobre el Valle del Cabriel y Cuenca (mi trabajo me ha costado).
- Dos años y medio de acampadas cuando era algo más joven recorriendo cada fin de semana todos los pueblos de la Serranía de Cuenca (fotografías inclusive), y el conocimiento de rutas casi desconocidas.
-La experiencia de haber recorrido exhaustivamente los parajes de la Serranía durante más de veinte años.
- Y mucho amor por esta tierra.
Qué es lo que ya tengo elaborado:
-Genealogía de los Marqueses de Moya y Villena, de los señores de Albornoz, de los Condes de Roja (Requena).
-Un estudio de la red hidrográfica antes que el Pantano de Contreras inundara campos, puentes y batanes, un pantano que tanta agua nos reserva a los insaciables valencianos y que tanto daño ha hecho a pueblos como Enguídanos, Villargordo del Cabriel, o la Pesquera cultural, económica y socialmente. Dicen que es el precio del progreso.
Perdonar por mi extensión, pero ahora respiro mejor.
Veo que este foro se está animando y ya no se habla de botellones y de las muy degeneradas fiestas de agosto en que hemos convertido los “homo-urbanitas”, la mayoría hijos del pueblo, la fiesta de La Virgen y San Roque, a falta de un orden público establecido y en detrimento de un turismo más permanente, de calidad y fiel a sus principios (turistas y personas dispuestas a establecer su segunda residencia, que buscan escuchar el silencio, disfrutar de la naturaleza que nos brinda el Valle del Cabriel).
Una cosa son las verbenas hasta el amanecer y otra cosa es convertir el pueblo en una discoteca versus discoteca 2008 de ciudad (con todos sus vicios y desmanes y con menores por medio). Soy de la “generación de los 80” y he vivido cómo fue engullida por “la ruta del bacalao” autofagocitándose de sus vicios y desmanes. Lo que era libertad se convirtió en libertinaje.
Gracias a “Pueblos de España” por frenar este tipo de mensajes que no dan muy buena publicidad a estos pueblos y desde aquí quiero transmitiros que fuera del mes de agosto, Enguídanos y el resto del Valle del Cabriel son lugares fantásticos donde disfrutar de la cultura (de la geología y la historia), de la naturaleza (por senderos increíbles, de más de 700 especies de plantas de vegetación Mediterránea que han desaparecido de la mayor parte del territorio levantino).
Si algo tiene Enguídanos y casi nadie ha reparado es que es el único pueblo de Cuenca que tiene un microclima mediterráneo-continental con muy pocas diferencias con el clima de la costa de Valencia (afortunadamente menos húmedo y algo más frío en invierno por ser serrano). Esto también ha favorecido la convivencia en el término de
De varios tipos de paisaje totalmente diferentes y con una riqueza botánica inmensurable y de un gran valor ecológico, pulmón para el resto del Levante desertizado. Todo esto es lo que hay que proteger.
Si algo tienen estos pueblos es poder viajar por la historia viviéndola con el paisaje. Intocables por la gran vorágine urbanística estos pueblos mantienen caminos y senderos de hace miles de años, yacimientos históricos de hasta más de 3.000 años, o sus ruinas en el peor de los casos. Todo esto es lo que hay que proteger.
Deberíamos estar agradecidos por un río Cabriel que nos ha horadado estratos de hasta más de 200 millones de años y nos ha puesto al alcance la capacidad de andar por fondos marinos con sus fósiles petrificados del secundario, aragonitos y jacintos de Compostela del Triásico (cristalizados cuando aparecían los primeros dinosaurios), y viajar desde el momentos actual, era por era a los albores de la aparición de la vida vertebrada caminando sobre la tierra (que no en la Tierra). Todo esto es lo que hay que proteger.
Gracias de nuevo a “Pueblos de España” por enriquecer a la web con este foro.
Quizás ya estemos creando ese foro del Valle del Cabriel y no nos hayamos dado cuenta. Se me ha ocurrido que podíamos colaborar en enriquecer de contenido todas las páginas de los pueblos del Valle del Cabriel (Narboneta, Henarejos, Víllora, Mira, Cardenete, Villar del Humo, Boniches, Camporrobles, Villargordo del Cabriel, Venta del Moro, Minglanilla, Iniesta, etc.) y a ver si alguien se anima a colaborar.
Hace cinco años que inicié esta “cruzada” cultural. Hasta ese momento sólo disfrutaba de mis conocimientos y descubrimientos, como mi familia y con mis verdaderos amigos. Bueno, me voy a sincerar un poco.
Tengo 45 años y soy hijo del pueblo (de Enguídanos). Mis antepasados o son directos del pueblo o provienen de Mira, Paracuellos de la Vega o Carboneras del Guadazón. Mis antepasados también se extendieron a Boniches, y a los pueblos de alrededor de Enguídanos. Aunque no conserve el apellido soy Luján por los dos costados (el paterno, y el materno), soy “CasasNuevas”, soy “Diablo”, soy “Llorón”, soy “Gazpacho”. Todo esto es lo que hay que proteger.
Como habréis imaginado nací y vivo en Valencia pero nunca he perdido mi identidad. Mi trabajo es, ante todo, un homenaje a mis padres que emigraron y gracias a los cuales pude recibir una cultura que a ellos les fue negada, a todos mis antepasados cuya curiosidad heredé y que me han enseñado a ir descubriendo la verdadera esencia del ser humano y a amar y respetar aquello por hemos sobrevivido más de 6,5 millones de años y hemos podido realizar nuestra particular revolución tecnológica: la Naturaleza.
Hace cinco años reflexioné sobre varias cuestiones:
- Estamos de paso, qué pinto yo en esta Historia, cuál es el sentido de la vida, y todas esas cuestiones que más de uno nos plantemos en algún momento de nuestra existencia.
- Qué iba pasar con todo lo que había redescubierto, con todos los conocimientos adquiridos y que tan feliz me habían hecho. Era evidente que si no los transmitía quedarían en el olvido.
- Qué iba pasar con el Valle del Cabriel unas cuantas generaciones posteriores. Es evidente: la población desaparecería. Como mucho algunas segundas residencias que a falta de población permanente y de servicios, también acabarían por desaparecer.
Fue entonces cuando decidí colaborar con la dinamización del Valle del Cabriel (el Cabriel era mi segundo gran amor y tenía muchos conocimientos que ofrecer).
Así es como me puse en contacto con el alcalde y así es como me decidí a dar mi primera conferencia de historia coincidiendo con el 450 aniversario de la obtención del Villazgo de Enguídanos de la que ni siquiera en Ayuntamiento tenía conciencia (y que “Pueblos de España”, voluntariamente, me ha dignado introduciéndola en la Historia de Enguídanos). Así llego la segunda: “Historia Geológica del Valle del Cabriel”, y un mural de 12 metros que elaboré íntegramente sobre el mismo tema, que tímidamente firmé sobre las láminas y que levantó una herida en mi interior. Sirvió para que políticos se hicieran una foto junto al mismo (en la que no aparece el autor), y a que la autoría de dicho mural apareciese como de ADIMAN, que se limitó a hacer la obra y a contratar un ceramista reconocido de Manises (Valencia) para pintar mi diseño, y una agencia de publicidad para que imprimiese los “plotters” con los diseños elaborados por mi y que sólo retocaron la imagen central. Ninguna referencia se ha hecho sobre mi autoría en este trabajo en estos boletines. Ni siquiera un reconocimiento.
Además de amar la Cultura, también manejo bastante el diseño gráfico. Mi trabajo no sería posible sin estos conocimientos.
Con respecto al mural nunca pensé en cobrar nada por ello pues fue pensado como un regalo cultural para Enguídanos, para el pueblo. De hecho, nunca cobré nada por ello. Ni por ello, ni por ninguna de las Conferencias que en el pueblo he dado.
Aún así, me decidí a dar mi tercera conferencia (casi 250 páginas de Power Point) sobre “El Valle del Cabriel: Umbral de la Celtiberia”. Mi cruzada es contra la incultura y a favor de la conservación que la Tierra y nuestros antepasados nos han legado, no contra la Política.
Por cierto, las conferencias las tenéis a vuestra disposición cuando queráis (fotografía, mapas, y dibujos), inclusive.
Lo del libro… “estoy en ello”. Podría haber publicado ya uno simplemente con las Conferencias pero mi intención es como manifesté en última conferencia era ampliar la información incluyendo el resto del Valle del Cabriel. Sólo un Cabriel unido puede que esto siga adelante. Sólo ofreciendo toda la riqueza natural y cultural del Valle del Cabriel se puede dinamizar el mismo. Juntos tenemos mucho que ofrecer.
Y qué es lo que tengo en la recámara:
- Muchos “gigas” de bibliografía sobre el Valle del Cabriel y Cuenca (mi trabajo me ha costado).
- Dos años y medio de acampadas cuando era algo más joven recorriendo cada fin de semana todos los pueblos de la Serranía de Cuenca (fotografías inclusive), y el conocimiento de rutas casi desconocidas.
-La experiencia de haber recorrido exhaustivamente los parajes de la Serranía durante más de veinte años.
- Y mucho amor por esta tierra.
Qué es lo que ya tengo elaborado:
-Genealogía de los Marqueses de Moya y Villena, de los señores de Albornoz, de los Condes de Roja (Requena).
-Un estudio de la red hidrográfica antes que el Pantano de Contreras inundara campos, puentes y batanes, un pantano que tanta agua nos reserva a los insaciables valencianos y que tanto daño ha hecho a pueblos como Enguídanos, Villargordo del Cabriel, o la Pesquera cultural, económica y socialmente. Dicen que es el precio del progreso.
Perdonar por mi extensión, pero ahora respiro mejor.
