
Lo más impresionante de Fresneda es, sin duda ver, o mejor, adivinar el grandioso
edificio que debió ser el templo dedicado a
San Miguel Arcángel, construido en el siglo XVIII, que hoy día, aunque en
ruinas y con una reconstrucción de
fachada y limpieza de aledaños realizada recientemente, sigue dominando la población. El visitante que sea curioso, puede disfrutar de un rato de ocio paseando sobre sus ruinas, y atravesar las paredes por sus grietas.
En los libros de Visitas del Obispado del año 1656, dice: "Hay un templo nuevamente edificado y embovedado, que van adornando poco a poco. El antiguo se había hundido."
Actualmente, la
iglesia que sustituyó a ésta, se sitúa a la entrada de la población, aislada del resto de edificaciones y en medio del
campo, es un edificio nuevo, con estructura de
salón y mucho menor en dimensiones que el primitivo templo.
Otro antiguo edificio que encontramos en el municipio, es el dedicado al
Ayuntamiento, construido en los siglos XVI-XVII y situado en la parte baja del
pueblo, el cual ha sido remodelado ampliamente, originándole una notable transformación, pero sin embargo mantiene su viguería original.