¡Ay que repelús me entra!.. Desde los piés a la boca , al leer el relato de la bajada de La Virgen de la Cuesta desde su ermita hasta el pueblo.
No soy de Huelves, pero un poco si que me siento, y ELLA sabe porqué, y yo también digo como decía valeriano. ¡Viva la Virgen de la Cuesta!, y prometo que un día me verás por ahí.
No soy de Huelves, pero un poco si que me siento, y ELLA sabe porqué, y yo también digo como decía valeriano. ¡Viva la Virgen de la Cuesta!, y prometo que un día me verás por ahí.