No sé cuanto tiempo llevará el olmo en esa plaza pero sí es cierto que en muchísimos pueblos de España aparece la añosa figura de un olmo en una plaza aledaña a la iglesia.
Este concretamente estuvo vivo hasta avanzados los años 70. Era clásico en los veranos echarse la siesta a la sobra del olmo o del palacio. Tenía un valor emotivo notable en los mayores del pueblo.