Hola amigos Foreros/as
Saludos a todos y especialmente al Forero mas asiduo y prolífico, a la vez que menos perezoso de este Foro, Juanito el Monaguillo, que una vez mas nos trae un tema candente de la actualidad, que a muchos nos está poniendo enfermos de cólera e impotencia. La corrupción. Pondré mi granito de arena sobre ello en mi próximo escrito, ya que en este quiero pedir disculpas por mi retraso en contaros lo que fue la fiesta de Todos los Santos y el día de Difuntos en nuestro pueblo.
Normalmente me voy a Cuenca los viernes y me llevo mi ordenador, así que una vez en el pueblo, desde mi terraza o salón y a la vista del Vallejo y Cerro de las Palomas, con cielo azul o nublado, suelo escribir en el Foro. Pero esta vez no ha sido así porque me fui "con lo puesto" y además el sábado.
La verdad es que no puedo contar mucho, pues por problemas de agenda no llegué al pueblo hasta las 14'30 del día 1º, así que no pude asistir a la Santa Misa que me han contado que fue multitudinaria. Un cumpleaños familiar en las Eras Altas, ineludible por estar en el mismo familia de Valencia, a la que no veía desde hace tiempo, y que se marchaba esa misma tarde, me impidió ir al cementerio en ese día, así que una vez en casa encendí en mi cocina las velas que durante la noche alumbrarían en la otra vida a mis familiares fallecidos.
Esa noche, que tantos recuerdos de tristeza y respeto nos trae a los que pasamos de los 55-60 años, en la que se contaban historias de miedo y apariciones que nos marcaron a muchos, (Yo tuve miedo hasta los 15 años por lo menos), y en la que lucían lamparillas encendidas todo el día y noche, esa noche como digo, en el pueblo se hizo una fiesta que organizó Joselín en su bar, en la que participó disfrazado terroríficamente todo el que quiso, principalmente jóvenes. Suscribo en su totalidad todo lo que dice Ábaco en su escrito del día 2.
El día 2 amaneció como un día primaveral, y solamente el color cobrizo de las hojas de los árboles nos hacía ver que es otoño. en la Misa, dijo el sacerdote de subir la hermosa imagen de Jesús el Nazareno a su "casa", el Calvario, pues estaba aun en la Iglesia desde las fiestas del Cristo, y así se hizo. Ya se notaba la ausencia de muchos paisanos que a esa hora ya se habían marchado por no aguantar las clásica caravana hasta Madrid y otras capitales.
El paseo hasta el cementerio en mangas de camisa, contemplando el campo recién arado y disfrutando de sus olores, por la carretera asfaltada fue precioso, pero mas precioso fue, al llegar al mismo, ver la ornamentación y limpieza de las lápidas. Era un premio para nuestros ojos contemplar las diversas flores que con sus colores alegraban nuestro estado de ánimo. Las fotos de nuestros seres queridos parecían sonreír y decirnos "Gracias por venir". Parecía aquello un concurso floral al que contribuía la limpieza de los preciosos mármoles y granitos, y la limpieza en general del cementerio, (así como la ausencia de ladrillos para sujetar los ramos).
El día primaveral, las flores y la compañía de mis sobrinos y sobrinas hizo que nos quedáramos recordando a nuestros seres queridos, y sus vivencias durante una hora para después rematar la mañana con un vermout con cacahuetes en "ca" Bernardo.
Y después otra vez invitado a comer gachas que hizo mi prima Pilar, y de postre! puches!. Como para guardar la línea...
Bueno Foreros/as, espero haber satisfecho un poquito vuestra curiosidad sobre tan entrañable fiesta, y deciros que recorrimos el Cementerio de punta a punta "saludando" con cariño y respeto a todos los seres queridos de los que no habéis podido ir.
Os mando un cordial saludo
Manuel.
Saludos a todos y especialmente al Forero mas asiduo y prolífico, a la vez que menos perezoso de este Foro, Juanito el Monaguillo, que una vez mas nos trae un tema candente de la actualidad, que a muchos nos está poniendo enfermos de cólera e impotencia. La corrupción. Pondré mi granito de arena sobre ello en mi próximo escrito, ya que en este quiero pedir disculpas por mi retraso en contaros lo que fue la fiesta de Todos los Santos y el día de Difuntos en nuestro pueblo.
Normalmente me voy a Cuenca los viernes y me llevo mi ordenador, así que una vez en el pueblo, desde mi terraza o salón y a la vista del Vallejo y Cerro de las Palomas, con cielo azul o nublado, suelo escribir en el Foro. Pero esta vez no ha sido así porque me fui "con lo puesto" y además el sábado.
La verdad es que no puedo contar mucho, pues por problemas de agenda no llegué al pueblo hasta las 14'30 del día 1º, así que no pude asistir a la Santa Misa que me han contado que fue multitudinaria. Un cumpleaños familiar en las Eras Altas, ineludible por estar en el mismo familia de Valencia, a la que no veía desde hace tiempo, y que se marchaba esa misma tarde, me impidió ir al cementerio en ese día, así que una vez en casa encendí en mi cocina las velas que durante la noche alumbrarían en la otra vida a mis familiares fallecidos.
Esa noche, que tantos recuerdos de tristeza y respeto nos trae a los que pasamos de los 55-60 años, en la que se contaban historias de miedo y apariciones que nos marcaron a muchos, (Yo tuve miedo hasta los 15 años por lo menos), y en la que lucían lamparillas encendidas todo el día y noche, esa noche como digo, en el pueblo se hizo una fiesta que organizó Joselín en su bar, en la que participó disfrazado terroríficamente todo el que quiso, principalmente jóvenes. Suscribo en su totalidad todo lo que dice Ábaco en su escrito del día 2.
El día 2 amaneció como un día primaveral, y solamente el color cobrizo de las hojas de los árboles nos hacía ver que es otoño. en la Misa, dijo el sacerdote de subir la hermosa imagen de Jesús el Nazareno a su "casa", el Calvario, pues estaba aun en la Iglesia desde las fiestas del Cristo, y así se hizo. Ya se notaba la ausencia de muchos paisanos que a esa hora ya se habían marchado por no aguantar las clásica caravana hasta Madrid y otras capitales.
El paseo hasta el cementerio en mangas de camisa, contemplando el campo recién arado y disfrutando de sus olores, por la carretera asfaltada fue precioso, pero mas precioso fue, al llegar al mismo, ver la ornamentación y limpieza de las lápidas. Era un premio para nuestros ojos contemplar las diversas flores que con sus colores alegraban nuestro estado de ánimo. Las fotos de nuestros seres queridos parecían sonreír y decirnos "Gracias por venir". Parecía aquello un concurso floral al que contribuía la limpieza de los preciosos mármoles y granitos, y la limpieza en general del cementerio, (así como la ausencia de ladrillos para sujetar los ramos).
El día primaveral, las flores y la compañía de mis sobrinos y sobrinas hizo que nos quedáramos recordando a nuestros seres queridos, y sus vivencias durante una hora para después rematar la mañana con un vermout con cacahuetes en "ca" Bernardo.
Y después otra vez invitado a comer gachas que hizo mi prima Pilar, y de postre! puches!. Como para guardar la línea...
Bueno Foreros/as, espero haber satisfecho un poquito vuestra curiosidad sobre tan entrañable fiesta, y deciros que recorrimos el Cementerio de punta a punta "saludando" con cariño y respeto a todos los seres queridos de los que no habéis podido ir.
Os mando un cordial saludo
Manuel.