Hace ya algunos años que el PSOE. ganó sus primeras elecciones. Apenas cinco años después de los primeros comicios democráticos España entera se echó a la calle, primero a votar por EL CAMBIO y más tarde a celebrar la victoria socialista. Yo siempre me acuerdo de esta fecha. Ha pasado el tiempo, el país ha cambiado efectivamente pero muchas ilusiones quedaron atrás. Pertenezco a lo que alguien muy acertadamente llamó en su día la generación del desencanto. Aquellos chicos y chicas que en la transición dieron su entrega a la lucha por las libertades en manifestaciones contra la derecha y dábamos mítines en los centros de trabajos (y antes los Instituto). Fuimos la generación que apostó directamente desde los nuestros primeros puestos de trabajo por Felipe y Alfonso y sufrimos años de paro aunque no en mi caso. (En mi caso, me tuve que apretar el cinturón varias veces por solidaridad, según Felipe, para compensar las diferencias sociales)
Hoy somos mayores, vemos crecer a los chavales en un mundo diferente al que tuvimos nosotros, aunque sin llegar a aquello de "Ya somos todo contra el pensamiento único de cuando teníamos veinte años".
Algo queda de lo que fuimos y hacemos todo lo posible por construir y vivir en una sociedad mejor.
No olvidemos nunca nuestras raíces ni La lucha por la igualdad, el reparto equitativo de la tortilla
el compañerismo, ayudar al débil... ser solidarios, grandes palabras ahora en des uso,
Esto no es apología a favor de ningún partido político. Sólo son vivencias en una fecha histórica.
Que no histérica. En unos momentos como los actuales, por dios, cuatro millones de parados, más setecientas mil personas, según un informe de Caritas en el umbral de la pobreza, yo le quitaría el umbral.
Yo soy de aquellos del pelo largo y barba que cuando pasaba por la puerta de los bares, los mayores del lugar.
Decían: estos... estas melenas son los que van a salvar al país, anda que estamos bien, y aquí estoy con mi trayectoria, y todavía en la brecha.
¡! Como ya nadie nos saca a la calle! desde que los sindicatos oficiales están subvencionados, y han pasado a ser funcionarios, parece ser que todo es color de rosas y que el trabajador no tiene problemas! pues no es así ¡, hay mucha precariedad en el empleo y muchas modalidades de contratación basura aún hoy en el siglo XXI, sigo viendo a los albañiles, sentados en cuatro ladrillos para comer y por mesa otros cuatro ladrillos y se van a sus casas con el mono puesto porque aun hoy no tienen casetas con duchas para asearse y se llevan el cemento, la arena y el hormigón pegados a sus botas de trabajo, hoy aquí mañana allí, por vestuario su propio coche.
Hace poco tiempo estuve en Córdoba en una manifestación por la reforma del estatuto del trabajador, by muchas banderas Republicanas, al final se canto la internacional.
Y... Soñé, si, soñé, con un mundo mejor... pero, claro, soñar, es gratis.
Lo que parece ser, que no es gratis, es que todos los políticos, miren en la misma dirección, eso, parece ser, que debe de costar, unas Elecciones Generales, que gane el PP. Y entonces, todo el Arco Parlamentario, estarán a partir un piñón, para demostrar que están a favor de los ciudadanos y... en contra del PP. En cualquier caso, los más perjudicados, siempre van a ser los mismos... los de siempre, los mas desfavorecidos.
Hoy me ha salido la vena sindical, que no será, ningún precedente.
Saludos cordiales,
Mediterraneo.
Hoy somos mayores, vemos crecer a los chavales en un mundo diferente al que tuvimos nosotros, aunque sin llegar a aquello de "Ya somos todo contra el pensamiento único de cuando teníamos veinte años".
Algo queda de lo que fuimos y hacemos todo lo posible por construir y vivir en una sociedad mejor.
No olvidemos nunca nuestras raíces ni La lucha por la igualdad, el reparto equitativo de la tortilla
el compañerismo, ayudar al débil... ser solidarios, grandes palabras ahora en des uso,
Esto no es apología a favor de ningún partido político. Sólo son vivencias en una fecha histórica.
Que no histérica. En unos momentos como los actuales, por dios, cuatro millones de parados, más setecientas mil personas, según un informe de Caritas en el umbral de la pobreza, yo le quitaría el umbral.
Yo soy de aquellos del pelo largo y barba que cuando pasaba por la puerta de los bares, los mayores del lugar.
Decían: estos... estas melenas son los que van a salvar al país, anda que estamos bien, y aquí estoy con mi trayectoria, y todavía en la brecha.
¡! Como ya nadie nos saca a la calle! desde que los sindicatos oficiales están subvencionados, y han pasado a ser funcionarios, parece ser que todo es color de rosas y que el trabajador no tiene problemas! pues no es así ¡, hay mucha precariedad en el empleo y muchas modalidades de contratación basura aún hoy en el siglo XXI, sigo viendo a los albañiles, sentados en cuatro ladrillos para comer y por mesa otros cuatro ladrillos y se van a sus casas con el mono puesto porque aun hoy no tienen casetas con duchas para asearse y se llevan el cemento, la arena y el hormigón pegados a sus botas de trabajo, hoy aquí mañana allí, por vestuario su propio coche.
Hace poco tiempo estuve en Córdoba en una manifestación por la reforma del estatuto del trabajador, by muchas banderas Republicanas, al final se canto la internacional.
Y... Soñé, si, soñé, con un mundo mejor... pero, claro, soñar, es gratis.
Lo que parece ser, que no es gratis, es que todos los políticos, miren en la misma dirección, eso, parece ser, que debe de costar, unas Elecciones Generales, que gane el PP. Y entonces, todo el Arco Parlamentario, estarán a partir un piñón, para demostrar que están a favor de los ciudadanos y... en contra del PP. En cualquier caso, los más perjudicados, siempre van a ser los mismos... los de siempre, los mas desfavorecidos.
Hoy me ha salido la vena sindical, que no será, ningún precedente.
Saludos cordiales,
Mediterraneo.