El probe Juli-án está que no cabe en sí. Será de haberse conocido... o no.
Nos cuenta que no quiere hablar de política, pero cuando lo hace no habla de política, habla de corrupción y enumera una serie de “supuestos” actos de corrupción que afectan al Partido Popular. O eso quiere él. Fijáos en la notita que habla de Alejandro Agag, que quien le acusa es Leire Pajín diciendo que “parece que”… vamos pruebas irrefutables como esa le llevaran al banquillo ¡seguro!
Bien pero lo que nuestro amigo Juli-án deja claro es su idea de “la corrupción”. Parece que sólo condena la corrupción cuando roza a los populares pero no dice absolutamente nada de las CUADRAS, los ATICOS de lujo, la DECORACION gratis total de Bono, por no hablar de Paulita y su papá, los trajes de De la Vogue, etc. (obviemos el Crimen de Estado del GAL). Vamos que esta corrupción debe ser la monda de “guay” para nuestro amigo Juli-án pues nada dice al respecto, ¿o es que sólo condena por su interés partidario y sectario? Al igual que algunos de este foro, que no condenan el golpe de estado en el coto de caza, ni las falsas denuncias, y si las peleas callejeras en que no salen muy bien parados. El amigo Juli-án no condena la corrupción nacional socialista que afecta al partido más podrido que ha tenido España en su larga historia, lo que le deja con las vergüenzas al aire.
Lo mismo le pasa ahora, cuando si habla política, que deja su ideología totalitaria al descubierto. Para él, que tanto MIEDO le dan los que no votan por su libre elección, deberían SER OBLIGADOS A VOTAR.
Por ejemplo, este sujeto no aboga por una campaña pidiendo que se cambie la ley electoral, sino que insta a la OBLIGATORIEDAD del voto, como en todos los regímenes totalitarios, es decir, de izquierdas, en los que sus líderes eran (y son) elegidos por el 99,9998 por ciento de los votos.
Nos cuenta que no quiere hablar de política, pero cuando lo hace no habla de política, habla de corrupción y enumera una serie de “supuestos” actos de corrupción que afectan al Partido Popular. O eso quiere él. Fijáos en la notita que habla de Alejandro Agag, que quien le acusa es Leire Pajín diciendo que “parece que”… vamos pruebas irrefutables como esa le llevaran al banquillo ¡seguro!
Bien pero lo que nuestro amigo Juli-án deja claro es su idea de “la corrupción”. Parece que sólo condena la corrupción cuando roza a los populares pero no dice absolutamente nada de las CUADRAS, los ATICOS de lujo, la DECORACION gratis total de Bono, por no hablar de Paulita y su papá, los trajes de De la Vogue, etc. (obviemos el Crimen de Estado del GAL). Vamos que esta corrupción debe ser la monda de “guay” para nuestro amigo Juli-án pues nada dice al respecto, ¿o es que sólo condena por su interés partidario y sectario? Al igual que algunos de este foro, que no condenan el golpe de estado en el coto de caza, ni las falsas denuncias, y si las peleas callejeras en que no salen muy bien parados. El amigo Juli-án no condena la corrupción nacional socialista que afecta al partido más podrido que ha tenido España en su larga historia, lo que le deja con las vergüenzas al aire.
Lo mismo le pasa ahora, cuando si habla política, que deja su ideología totalitaria al descubierto. Para él, que tanto MIEDO le dan los que no votan por su libre elección, deberían SER OBLIGADOS A VOTAR.
Por ejemplo, este sujeto no aboga por una campaña pidiendo que se cambie la ley electoral, sino que insta a la OBLIGATORIEDAD del voto, como en todos los regímenes totalitarios, es decir, de izquierdas, en los que sus líderes eran (y son) elegidos por el 99,9998 por ciento de los votos.