Mira que lo tenía fácil. Cualquier deficiente intelectual habría superado la estulticia de Leire Pajín, ahora ministra de Sanidad. Pero Marcelino Iglesias se empeña en hacer buena a su antecesora, que ya es...
Lleva en el cargo apenas un mes y sus meteduras de pata ya son sonadas. El ex-presidente del Gobierno, José Luis Rodriguez Zapatero, ha nombrado número 3 del PSOE a un personaje críptico que no distingue entre el Gobierno y el partido. El otro día sin ir más lejos señaló en rueda de prensa que "todos los que estamos en este Gobierno trabajaremos intensamente..." Pero es que unos días después, en la reunión de "barones" del PSOE para implantar el último invento (la Agenda Social), salió diciendo cuáles iban a ser las políticas activas de empleo que se van a aplicar desde ahora. Políticas que (este hombre debe desconocerlo) no están en manos del Gobierno, sino de las CC. AA. (de todas, no sólo de las gobernadas por el PSOE). El caso es que Iglesias habla por boca del Gobierno, como si fuera el portavoz suplente de Rubalcaba, y se queda tan ancho. Definitivamente no se ha enterado de que él no es miembro del Gobierno.
Me he referido a Zapatero como "ex-presidente del Gobierno", y no, no, no me he equivocado. Zapatero dimitió de facto cuando nombró Vicepresidente primero, Ministro del Interior y portavoz de todo lo que se pueda vocear a Rubalcaba, la Y del GAL (ya conocemos la X). Ahora Zapatero queda para exhibir su ignorancia política y económica por el mundo, y para hacer el ridículo en las reuniones del G-20. Rubalcaba -el muñidor de la generación más ignorante de este país, la generación ESO- habla con soltura de asuntos de interior, pontifica sobre economía, habla de Marruecos, diserta sobre ETA "y su entorno", preside el Consejo de Ministros y coordina (con gran eficacia, por cierto) a todos los ministros: no hay más que ver a Jáuregui (que no es Ministro de Exteriores) hablando sobre el "núcleo duro" de la soberanía de Marruecos en el Sahara -derribando en diez palabras décadas de diplomacia-, mientras la señorita Trini (Guerra dixit) le lleva un jamón a Evo Morales y se deja sobar por Correa...
Pero volvamos a Marcelino Iglesias: el secretario de organización del PSOE, ha manifestado su sorpresa por las reacciones que han provocado las declaraciones del ex-presidente Felipe González sobre la guerra sucia contra ETA en los años 80, porque según ha dicho "se ve como si hubiera pasado ayer y pasó hace más de 20 años". "Sería partidario de que las viéramos con una perspectiva ya histórica", ha afirmado el dirigente socialista durante una entrevista en RNE. En opinión de Iglesias, "cada vez que Felipe González dice algo nuestra derecha se excita muchísimo". Según ha añadido, "cada vez que hala, sus palabras excitan a mucha gente y complica a mucha gente". En efecto -añado yo-, debemos verlo con perspectiva histórica, igual que cuando analizamos a Felipe II. Perspectiva histórica y planetaria. A mí lo que me excita las meninges es la miseria intelectual, pero supongo que será mi problema...
Para Marcelino Iglesias, Felipe González "ha sido un gran presidente del Gobierno y ha sido un gran estadista", pero a pesar de ello, "queda mucha gente que le tiene metido el dedo en el ojo", ha asegurado. Es cierto -añado yo-, fue un gran estadista. Dejando un país con más de 3.000.000 de parados. Un país en el que un DIRECTOR GENERAL de la Guardia Civil estuvo en busca y captura internacional durante meses. Un país en el que un Ministro y un Secretario de Estado fueron condenados (por sentencia firme) y cumplieron condena por de TERRORISMO DE ESTADO, previa despedida con un abrazo por su parte en la puerta de la prisión. Un gran estadista.
Un sujeto que tuvo un "conflicto moral" porque no sabía si debía volar por los aires una casa llena de terroristas, en vez de entrar para detenerlos a todos y ponerlos a disposición de la Audiencia Nacional, se retrata por sí mismo. El grado de ética del Sr. González es similar al grado de ética de una piedra, pues si es incapaz de discernir lo que "se puede" y lo que "no se puede" hacer, aviados estamos. Y si 20 años después aún no sabe si tomó la decisión correcta, pues qué quieren que les cuente... No puede tener un conflicto moral alguien que exhibe una amoralidad tan aplastante.
El Sr. Marcelino Iglesias haría bien en callarse la boca, pues hacerle la ola a un ex-presidente que dirigió una red que PRACTICABA el terrorismo de Estado como lo hizo Felipe González no creo que beneficie las expectativas electorales de su partido. Por ello, por los innumerables méritos reunidos en menos de un mes, y a pesar de que la elección ha sido larga, dura y difícil (dado el ingente número de gilipollas que pueblan este país nuestro), el galardón de este mes de noviembre es para el Sr. Marcelino Iglesias.
Lleva en el cargo apenas un mes y sus meteduras de pata ya son sonadas. El ex-presidente del Gobierno, José Luis Rodriguez Zapatero, ha nombrado número 3 del PSOE a un personaje críptico que no distingue entre el Gobierno y el partido. El otro día sin ir más lejos señaló en rueda de prensa que "todos los que estamos en este Gobierno trabajaremos intensamente..." Pero es que unos días después, en la reunión de "barones" del PSOE para implantar el último invento (la Agenda Social), salió diciendo cuáles iban a ser las políticas activas de empleo que se van a aplicar desde ahora. Políticas que (este hombre debe desconocerlo) no están en manos del Gobierno, sino de las CC. AA. (de todas, no sólo de las gobernadas por el PSOE). El caso es que Iglesias habla por boca del Gobierno, como si fuera el portavoz suplente de Rubalcaba, y se queda tan ancho. Definitivamente no se ha enterado de que él no es miembro del Gobierno.
Me he referido a Zapatero como "ex-presidente del Gobierno", y no, no, no me he equivocado. Zapatero dimitió de facto cuando nombró Vicepresidente primero, Ministro del Interior y portavoz de todo lo que se pueda vocear a Rubalcaba, la Y del GAL (ya conocemos la X). Ahora Zapatero queda para exhibir su ignorancia política y económica por el mundo, y para hacer el ridículo en las reuniones del G-20. Rubalcaba -el muñidor de la generación más ignorante de este país, la generación ESO- habla con soltura de asuntos de interior, pontifica sobre economía, habla de Marruecos, diserta sobre ETA "y su entorno", preside el Consejo de Ministros y coordina (con gran eficacia, por cierto) a todos los ministros: no hay más que ver a Jáuregui (que no es Ministro de Exteriores) hablando sobre el "núcleo duro" de la soberanía de Marruecos en el Sahara -derribando en diez palabras décadas de diplomacia-, mientras la señorita Trini (Guerra dixit) le lleva un jamón a Evo Morales y se deja sobar por Correa...
Pero volvamos a Marcelino Iglesias: el secretario de organización del PSOE, ha manifestado su sorpresa por las reacciones que han provocado las declaraciones del ex-presidente Felipe González sobre la guerra sucia contra ETA en los años 80, porque según ha dicho "se ve como si hubiera pasado ayer y pasó hace más de 20 años". "Sería partidario de que las viéramos con una perspectiva ya histórica", ha afirmado el dirigente socialista durante una entrevista en RNE. En opinión de Iglesias, "cada vez que Felipe González dice algo nuestra derecha se excita muchísimo". Según ha añadido, "cada vez que hala, sus palabras excitan a mucha gente y complica a mucha gente". En efecto -añado yo-, debemos verlo con perspectiva histórica, igual que cuando analizamos a Felipe II. Perspectiva histórica y planetaria. A mí lo que me excita las meninges es la miseria intelectual, pero supongo que será mi problema...
Para Marcelino Iglesias, Felipe González "ha sido un gran presidente del Gobierno y ha sido un gran estadista", pero a pesar de ello, "queda mucha gente que le tiene metido el dedo en el ojo", ha asegurado. Es cierto -añado yo-, fue un gran estadista. Dejando un país con más de 3.000.000 de parados. Un país en el que un DIRECTOR GENERAL de la Guardia Civil estuvo en busca y captura internacional durante meses. Un país en el que un Ministro y un Secretario de Estado fueron condenados (por sentencia firme) y cumplieron condena por de TERRORISMO DE ESTADO, previa despedida con un abrazo por su parte en la puerta de la prisión. Un gran estadista.
Un sujeto que tuvo un "conflicto moral" porque no sabía si debía volar por los aires una casa llena de terroristas, en vez de entrar para detenerlos a todos y ponerlos a disposición de la Audiencia Nacional, se retrata por sí mismo. El grado de ética del Sr. González es similar al grado de ética de una piedra, pues si es incapaz de discernir lo que "se puede" y lo que "no se puede" hacer, aviados estamos. Y si 20 años después aún no sabe si tomó la decisión correcta, pues qué quieren que les cuente... No puede tener un conflicto moral alguien que exhibe una amoralidad tan aplastante.
El Sr. Marcelino Iglesias haría bien en callarse la boca, pues hacerle la ola a un ex-presidente que dirigió una red que PRACTICABA el terrorismo de Estado como lo hizo Felipe González no creo que beneficie las expectativas electorales de su partido. Por ello, por los innumerables méritos reunidos en menos de un mes, y a pesar de que la elección ha sido larga, dura y difícil (dado el ingente número de gilipollas que pueblan este país nuestro), el galardón de este mes de noviembre es para el Sr. Marcelino Iglesias.