Desde 1296 hasta 1480, Moya irá de mano en mano en pago de favores o en garantía de servicios y pactos. En 1319, Fernando IV declaró esta Villa patrimonio de la Corona, previa propuesta de María de Molina.
Este hecho fue un hito importante alcanzado por Moya: ser REALENGO. Por poseer este título vendrá a sufrir numerosas vejaciones. Los reyes, con frecuencia, faltaron a su juramento aunque volvieron a confirmar su privilegio en 1390.
Este hecho fue un hito importante alcanzado por Moya: ser REALENGO. Por poseer este título vendrá a sufrir numerosas vejaciones. Los reyes, con frecuencia, faltaron a su juramento aunque volvieron a confirmar su privilegio en 1390.