¿tienes una panaderĂ­a?

NARBONETA: Te entiendo perfectamente Susi. Soy de esos "bichos...

Te entiendo perfectamente Susi. Soy de esos "bichos raros" para una sociedad que se ha sumido en la oscuridad de la caverna. Estamos desgraciadamente volvendo a una sociedad medieval y machacando una incipiente democracia. Con Rey o sin Rey, pero tenemos democracia, más o menos inmadura, pero democracia al fin y al cabo.
Las nuevas generaciones confunden el conocimiento de la Informática con el buen manejo de los videojuegos, que aparte de ejercitarte, o atrofiarte los dedos, no aportan nada al Conocimiento (aludiendo al Conocimiento como Conocimiento útil). Los padres hemos confundido la educación de nuestros hijos con la felicidad efímera que aportan a nuestros hijos los objetos de consumo. La educación de mi padre me enseñó y de la cual, por respeto a él, debo dar ejemplo es la que haga a tus hijos autosuficientes, independientes, con capacidad de subsistencia, y sobre todo, buenas personas.
El sacrificio que hicieron mis padres con tres hijos a cuestas y el que suscribe en camino, de abandonar su casa (si, la casa del Señorito -como lo llamaba mi padre-, y estaba muy orgulloso de haber sido ormero y haber dejado el legado de las ormas que aún se mantienen en pié en el Coto Manglano de San Antonio de Requena)... Sí, ese sacrificio.
Mi padre me enseñó a construir, no a destruir.
Me enseñó muchos valores, entre ellos, el valor de la Familia (que aunque esté lejos), siempre es TÚ FAMILIA.
Pero me enseñó, para lo poco católico que era, a su manera, el Nuevo Mandamiento de Cristo: "No hagas a los demás lo que a ti no te gusta que te hagan". Más o menos la antesala también, del primer mandamiento "amarás... y al prójimo como a ti mismo".
Sí, a la decisión de venirse a la Ciudad, le debo lo que soy y a los valores de ESCUCHAR, APRENDER, y de no tener prejuicios (de no prejuzgar a los demás) según sexo, raza, lengua, o vestimenta. Me inculcó el principal valor que lleva al RESPETO A LOS DEMÁS.... Y escuchar y aprender, que son las llaves al CONOCIMIENTO.
Pero también me enseño a exigir el RESPETO que das a los demás. El "respeto a los demás" es un bien colectivo. Es un derecho y una obligación humana: Ser respetuoso, ya que son las raíces de la SOCIEDAD. Y no voy a entrar en la alegoría de la Caverna de Platón en su República o a Saramago (tan distantes en el tiempo y tan próximos en el pensamiento socrático). No soy un iluminado sino más bien alguien que busca la luz al final de la Caverna. Y eso sólo se llega al CONOCIMIENTO con el aprendizaje.
Sí, Susi, te entiendo. Pero no hay nada como honrar a tus padres y mi padre AMABA su pueblo, su gentes...
Yo escuchaba todos los relatos y parajes de los que me hablaba mi padre. Y me transmitió ese amor por su pueblo, sus gentes, y por Cuenca, de la que de muchas generaciones llevo en mi interior sus genes.
Y esto es para mi un hobbi desde los 7 años; y me siento honrado de transmitir el Conocimiento aprendido, o de utilizarlo para investigar. Lo que no se cuenta, queda relegado en el olvido.
Son 38 años de búsqueda. Prefiero cegarme con la luz que contemplar su sombra en el fondo de la caverna.
No Susi, son muchos años de aprendizaje para alcanzar mi ritmo. Pero disfruta... y APRENDE lo que en tu interior consideres que es interesante o simplemente... te motive.
Las cosas sencillas son la esencia de la felicidad. Uno tiene que llevar su ritmo. Esto no es una carrera por investigar... sino por CONOCER y dar a conocer lo que conoces e interiorizar lo que otro te puede aportar a TÚ CONOCIMIENTO. Y disfrutar de lo que uno conoce.
Pero nunca hay que olvidar que la FAMILIA de uno, también es importante.
... Y encima también también te ha entrado la vena de INVESTIGADORA, que a mi me gusta llamarlo de otro modo, QUERER CONOCER que nos lleva a APRENDER.