CUENTO DE UNA HISTORIA REAL.
Frisaba yo sobre mis treinta abriles, e iba a comer a un restaurante bastante humilde de la ciudad condal, y siempre me servia una moza que tenía un deje en la voz que me era muy familiar por haberlo oído muchas veces.
Un día entramos en amena conversación y le pregunte de donde era, y ella muy resuelta y segura de si misma me contesto que era de un pueblo cerca de Madrid, yo no le hice más preguntas, pero al cabo de unos días hablamos otra vez y ella confeso de donde era, y resulta que era de un pueblo cerca del mío.
LA VIDA TIENE SUS SORPRESAS.
Cabellos largos, ideas cortas.
Frisaba yo sobre mis treinta abriles, e iba a comer a un restaurante bastante humilde de la ciudad condal, y siempre me servia una moza que tenía un deje en la voz que me era muy familiar por haberlo oído muchas veces.
Un día entramos en amena conversación y le pregunte de donde era, y ella muy resuelta y segura de si misma me contesto que era de un pueblo cerca de Madrid, yo no le hice más preguntas, pero al cabo de unos días hablamos otra vez y ella confeso de donde era, y resulta que era de un pueblo cerca del mío.
LA VIDA TIENE SUS SORPRESAS.
Cabellos largos, ideas cortas.