LA CAñADA DE LA RUBIA (LEYENDA DE LA APARICIóN DE LA VIRGEN)
Cuenta la tradición el origen del culto y veneración a la Virgen de la Rubia, situándolo en los siglos XV-XVI, cuando un agricultor de la vecina localidad de Carrascosa de Haro encontró, durante las tareas de labranza y en el término municipal de La Rada, una talla de la Virgen con el niño en brazos, trasladándola a su localidad de origen.
El hecho de que fuese un vecino de Carrascosa el que hiciera el hallazgo, y realizase este en tierras radeñas llevó a ambas poblaciones a determinar celebrar juntos las fiestas en honor a la “Rubia”, en un paraje conocido como la Cuesta Grande y también se levantó una ermita. De este edificio y de la fiesta de la Virgen también nos dan noticias las “Relaciones”: “ Y a una legua de esta Villa (Villaescusa) hay otra ermita que se llama Nuestra Señora de la Rubia, que el primero día de mayo de cada año se va a ella en procesión desde esta Villa.
Cuenta la tradición el origen del culto y veneración a la Virgen de la Rubia, situándolo en los siglos XV-XVI, cuando un agricultor de la vecina localidad de Carrascosa de Haro encontró, durante las tareas de labranza y en el término municipal de La Rada, una talla de la Virgen con el niño en brazos, trasladándola a su localidad de origen.
El hecho de que fuese un vecino de Carrascosa el que hiciera el hallazgo, y realizase este en tierras radeñas llevó a ambas poblaciones a determinar celebrar juntos las fiestas en honor a la “Rubia”, en un paraje conocido como la Cuesta Grande y también se levantó una ermita. De este edificio y de la fiesta de la Virgen también nos dan noticias las “Relaciones”: “ Y a una legua de esta Villa (Villaescusa) hay otra ermita que se llama Nuestra Señora de la Rubia, que el primero día de mayo de cada año se va a ella en procesión desde esta Villa.