Con ahínco y con tesón,
La greda de los barreros,
Trasladaban al tejar,
Con presteza los tejeros.
Y la ponen a secar,
La muelen con rapidez,
La dejan toda finita,
Como harina de gachitas.
Agua y greda a la pila,
La mezclan con ilusión,
Hasta hacerla una masa,
Como si fuera jabón.
Con la mayor rapidez,
Te amasan con destreza,
Y te ponen en un molde,
Para crearte a tí teja.
Y te ponen a secar,
Espacio para no pisar,
Más si se pone a llover,
Rápido que hay que entrar.
Al campo a por la leña,
Las cargas ha acarrear,
Los burros van caminando,
A la era del tejar.
El horno llenas de tejas,
Y la leña para quemar,
Día y noche sin desmayo,
El fuego no puede parar.
El horno ya se ha quemado,
Todos ha descansar,
Esperar a que se enfríe,
Para las tejas sacar.
Sergiete. dedicado a todos los tejeros.
La greda de los barreros,
Trasladaban al tejar,
Con presteza los tejeros.
Y la ponen a secar,
La muelen con rapidez,
La dejan toda finita,
Como harina de gachitas.
Agua y greda a la pila,
La mezclan con ilusión,
Hasta hacerla una masa,
Como si fuera jabón.
Con la mayor rapidez,
Te amasan con destreza,
Y te ponen en un molde,
Para crearte a tí teja.
Y te ponen a secar,
Espacio para no pisar,
Más si se pone a llover,
Rápido que hay que entrar.
Al campo a por la leña,
Las cargas ha acarrear,
Los burros van caminando,
A la era del tejar.
El horno llenas de tejas,
Y la leña para quemar,
Día y noche sin desmayo,
El fuego no puede parar.
El horno ya se ha quemado,
Todos ha descansar,
Esperar a que se enfríe,
Para las tejas sacar.
Sergiete. dedicado a todos los tejeros.