Hola, Víctor, como ves, aquí estoy, en Argentina, visitando la página de tu pueblo, como te lo prometí por correo particular. Me ha alegrado mucho que alguien me contestara y a ustedes, los que permanecen en Salinas. Vuelvo a decirles lo que escribiera el 2 de enero de este año. Además, y gracias a la carta que me ha enviado Víctor, donde me he sentido cálidamente invitada a conocerlo, les digo que, al contemplar la belleza del lugar donde viven, me hubiese encantado poder visitarlo. ¡Ojalá la vida ... (ver texto completo)