Iglesia y
ayuntamiento se unen por el
Arco Romano, que en realidad es barroco y del siglo XVII, y junto a él, el rotundo Pósito, que forma parte de una larga lista de hermosos
edificios llenos de
historia: la iglesia de los Jesuitas, la
Ermita de la
Virgen de los Remedios y los
conventos de Trinitarias, Carmelitas, Clarisas y Franciscanos. Notables son también sus
palacios, como el del Marqués de Valdeguerrero, el de Piquirroti y la
Casa de los Picos.