En Tresjuncos, esta especie, se encuentra en serio riesgo de desaparición (tres ejemplares registrados). Es quizás el arbusto más resitente a la sequía que crece en nuestros montes, soporta tranquilamente temperaturas superiores a 40 grados e inferiores a - 10 grados. Es capaz de vivir casi sin suelo, en los mismos riscos, pero a pesar de todas estas singulares características, resulta muy escasa, debido a que no rebroja tras la tala o quema. Job.