El
campo mismo se hizo
árbol en tí, parda encina.
Ya bajo sol que calcina
Ya contra hielo invernizo.
El agosto y el enero
Los copos de la nevasca
Los hilos del aguacero.
Siempre firme, siempre igual
Impasible, casta y buena
Oh Tú robusta y serena
Eterna encina rural.