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TRESJUNCOS: Titan, debo recordarte que no fueron las izquierdas,...

Titan, debo recordarte que no fueron las izquierdas, ni Rufo Moya, quienes se alzaron en armas y provocaron la guerra. Tampoco quiero decir con ello que Pedro Moral se mereciese lo que sufrió...

Antes de haber iniciado sus masacres en Andalucía y Extremadura -descabellos en plazas de toros incluídos-, Franco debería haber pensado en la seguridad de los partidarios derechistas que vivían en zona "roja", es decir ¡debería haber parado una guerra de la que sólo él y sus adláteres fueron responsables!

Pedro y Rufo fueron víctimas, cada uno en su momento. Ambos fueron fervientes defensores de la paz. La diferencia es que Pedro vivió para contarlo y Rufo no. Pedro murió de anciano y sus hijos gozaron de un estatus en cierto modo privilegiado. Rufo sin embargo murió al poco tiempo de salir de la cárcel, y casi pudo ser enterrado dignamente, debido a su doble condición de republicano y "protestante". Por más que se insista NO HAY RECIPROCIDAD, no es lo mismo estar escondido en la propia casa que estar preso en la cárcel y salir de ella mortalmente enfermo. Dicho sea esto con el mayor de los respetos hacia Pedro Moral y su familia.

No obstante, la justicia que no disfrutó Rufo en vida, le vino de manera póstuma, y literalmente de la mano de Javier Moral, motivo suficiente - a mi modo de ver -, para que una calle lleve el nombre de su progenitor.

Decidir si ambos personajes son equiparables o no, y por tanto dignos de sendas calles, no corresponde a nigún historiador o novelista, sino al pueblo de Tresjuncos, representado en su Ayuntamiento.

Por suerte las balas nunca podrán matar las palabras, por eso hoy Miguel Hernández o García Lorca tienen millones de admiradores en todo el mundo, mientras que nadie recuerda a sus asesinos, si no es para maldecir.