Las trazas originales son de Enrique Egas. Las obras de la
iglesia se detuvieron a mediados del siglo XVI, reemprendiéndose las obras en la segunda mitad del quinientos de la mano del arquitecto real Gaspar de Vega. Las obras de la iglesia fueron finalizadas por el también arquitecto real Francisco de Mora, cuya aportación es apreciable en el cerramiento de las
bóvedas y
fachada occidental.