Monumento natural Nacimiento del
río Cuervo.
El nacimiento del río Cuervo fue declarado Monumento Natural en 19991 y ocupa una superficie de 1709 hectáreas. En este lugar, el
agua (cuando lleva) brota de un manantial travertínico y escurre por enormes estalactitas de
roca calcárea (toba) recubierta de musgo, formando unas largas chorreras que se congelan en
invierno, ofreciendo una bella estampa fotografiada miles de veces cada año. En el nacimiento se pueden observar
grutas tras las
cascadas y simas en sus alrededores y es relativamente frecuente que se produzcan, de manera natural, derrumbamientos de sus barreras tobáceas.