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VILLAREJO DE FUENTES: ¡Hola Papageno!...

Un saludo a todos, Gracias a Dulcinea y a Eduardo he recibido esta magnifica historia en un bonito sobre verde, la verdad es que me gusta mucho, hay mucha amistad y cariño en este objeto y lo agradezco mucho, La carta de Dulcinea Tampoco tiene desperdicio ¡Vaya Crack ¡que esta hecha no se le escapa nada, es como 'Rastreator' ja, ja, últimamente estoy un poco espeso, quizás sea por un gran accidente de un amigo que se ha salvado de milagro, rodilla y cadera echas puré, unos jovencitos se durmieron y le embistieron por delante. Esperemos que se recupere poco a poco, las operaciones han sido todo un éxito y ahora es tiempo para recuperarse.
Bueno son cosas de la vida.
Un abrazo.

Papageno no creas que por decirme que estas espeso últimamente te vas a escapar de hacerme una valoración del relato y del libro en general. Tú que eres un experto lector ya me estas dando tu opinión y haciendo una critica constructiva ¡Ale a trabajar! ¿Y ti amigo qué tal sigue?

Abrazosssssssssss.

Saludos: Dulcinea.

Un saludo a todos.
Como ya te dije Dulcinea el librito me ha gustado mucho tanto su exterior como interior, creo que esta editorial tiene mucho futuro con ese fichaje de Eduárdo y de Kastefa en ciernes, sólo tienes que presionarlo un poco para poder publicar sus poesías, que creo que hace tiempo comentó que tenia y no me extrañaría nada en el, ya que es un hombre 10 (artisticamente hablando)
El relato de Eduardo tiene a mi juicio tiene algunos párrafos de gran literatura sobre todo al principio en la primera llegada a la farmacia. Me encanta de verdad. Bueno mi amigo no es que vaya muy bien un día bueno, le sigue otro no tan bueno, aunque yo creo que esta fuera de peligro.
Un abrazo.

Solo cinco palabras, dichas con sinceridad """gracias por tu amable critica"""

Eduardo

Un abrazo Eduardo, gracias a ti por donar tus trabajos para que podamos disfrutar con ellos. Cuanta bazofia he leído de supuestos reputados autores que no me comunicaban nada todo lo contrario a tu relato breve.
Un saludo.

¡Hola Papageno!

Totalmente de acuerdo con tu comentario. Eduardo es un escritor, escritor, de los buenos. Paradójicamente habiendo nacido con este don de de juntar letras y escribir historias, toda su vida profesional la ha dedicado a los números y las cifras. Para que veas como son las cosas. Un talento desaprovechado.

En otros mensajes anteriores hablábamos de lo que era arte, pues para mi el arte eso, algo innato que poseen algunas personas que son tocadas por una varita que las hace destacar de las demás, pudiendo hacer o crear algo que para los demás nos esta vetado. Póngase como ejemplo a Eduardo y su arte arrejuntando palabras.

Esta historia cuando la leí por primera vez me dejo maravillada, tanto por la historia como la manera en la que esta contada. Tú destacas el pasaje de la farmacia que esta muy bien pero te has fijado en como describe la muerte del brigadista cuando le abre la guerrera? Eso es poesía, no había leído nunca una muerte tan bonita descrita de esa manara. Mira para que no la busques te la pego aquí. “ Le desabrochó como pudo la guerrera sin esperar al médico, al abrirla, una rosa de sangre florecía con crecientes pétalos sobre el centro de su pecho, sin haber llegado aún el capitán ordenó con una energía que nunca tuvo.......” igual de bonita y poética describe la muerte de la paloma, te la adjunto también para que la veas “Inició el ave su caída al suelo en irregular verticalidad yendo a posar su cuerpo abatido sobre el propio pecho, jardín de rosas rojas de su compañero muerto,” Es preciosa la forma en la que están descritas las muertes de los dos protagonistas.

Papageno encantada de comentar contigo esta pequeña gran historia de Eduardo.

Abrazosssssssssssssss.

Saludos: Dulcinea.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Tienes razón Dulcinea, ese pasaje me recordó la canción de Nino Bravo

Con su amor por montera se marchó
cantando una canción,
marchaba tan feliz que escuchó
la voz que le llamó,
y tendido en el suelo se quedó
sonriendo y sin hablar,
sobre su pecho flores carmesí,
brotaban sin cesar... ... (ver texto completo)