Recuerdo con mucho cariño venir a buscar a mi padre a este lugar , le encantaba jugar a la pelota de mano , siemppre que el trabajo se lo permitia iba a jugar su partida.
Esta fabulosa plaza, tiempo atrás fue lugar de disputadas partidas de pelota a mano (en pleno verano, hacia las tres de la tarde, durante la siesta), así como de encarnizados partidos de futbol infantil en el recreo escolar.