Las
fiestas principales de
Yémeda son el día 2 de agosto, cuando se celebra el día de la
virgen de los Ángeles.
El modo en que se celebran estas fiestas es con una misa, dicho día, y una
procesión en la que se saca a hombros a la virgen por el
pueblo y después se invita a todos los habitantes y visitantes de allí a tomar un aperitivo.
Las fiestas duran hasta el 4 del mismo mes, y durante estos días hay
juegos organizados por la peña del pueblo, tanto para niños como para mayores, y por las
noches hay
baile en la
plaza amenizado por una orquesta.
El segundo día de la
fiesta se invita a toda la gente que hay en el pueblo a una cena, y el último día se realiza una cena para los miembros de la peña, a continuación se procede a la entrega de
premios de los juegos y posteriormente al baile, que para a altas horas de la madrugada para despedir las fiestas con una chocolate (hecho por mujeres del pueblo) y bollos. Se termina con
música.
Otras fiestas que se celebran son las del día 25 de abril, el día de
San Marcos, entonces se realiza una procesión hay una
cruz situada en unas eras del pueblo y se bendicen los
campos(debido a la época en que es no hay mucha gente), después se reparten unas tortas bendecidas y se procede a una
comida.
Yémeda se sitúa a 64 kilómetros de Cuenca y a 20(aprox)de Carboneras de Guadazaón.Siguiendo esta carretera se llega a una zona en la que puedes coger un desvío para llegar aquí o seguir a Cardenete, Villar del Humor y Enguídanos.
Su ayuntamiento es pequeño y formada,todavía, por habitantes del pueblo.
Como monumentos no hay ninguno sobresaliente, pero sí se puede ver el Balneario de allí, actualmente no está en funcionamiento aunque se está intentando reabilitar, y está sitúado a un kilómetro de pueblo y se encuentra justo al lado de una bonita cascada que cae sobre el río Guadazaón, formando un bonito paraje con toda las naturaleza a su alrededor.
Costumbres no hay que destacar mucho, en invierno como hay muy poca gente pues no hay mucho que comentar, solo que en vacaciones se llena de muchos visitantes. Es en verano cuando el pueblo vive de verdad, aunque no cabe decir que haya costumbres, los niños y mayores y algunos vendedores de otros pueblos llenan las calles durante el día y por la noche todos salen a la calle a tomar el fresco o a jugar.