Demasiados frentes abiertos que se van mezclando peligrosamente. La intimidad invade el terreno público de una colección. Y viceversa. Platos que no maridan bien. De la alta cultura a los platós chusqueros
Si él reflexiona íntimamente sobre aquello debe reconocer que no fue así".
"Con todo esto, a lo que hay que sumar la historia de las pruebas de paternidad sobre el hijo de Borja que dicen que yo promoví, se está intentando acabar con mi prestigio", afirma Carmen Thyssen
Cantidad que cobrará presuntamente el próximo 24 de julio, cuando cumpla 30 años.
Aunque ese nada hay que interpretarlo, pues Borja Thyssen recibe mensualmente una manutención de 300.000 dólares y de otros cinco millones de dólares (3,4 millones de euros) cada cinco años.
Él nunca fue así, nunca manifestó codicia cuando vivía conmigo. Ahora no lo reconozco, está por todas partes muy mal aconsejado. Además, tiene gente cerca de él que no le permite hablar conmigo. Eso lo tengo comprobado. Y mientras esté así no debe contar con nada", afirma.
Carmen Cervera interpreta esta guerra con el mayor de sus herederos (tiene además dos niñas adoptadas) como el resultado de las malas compañías de su hijo. "Está en una secta, como si estuviera abducido.
El Goya lo compró mi marido a un marchante de Nueva York cuando bautizamos allí al niño y lo tuvimos colgado unos días en la suite del hotel donde nos alojamos. Allí me dijo que el cuadro debería ser algún día para Borja. Algún día y cuando yo lo considere oportuno".
Sino por la forma escogida para enviar distintos mensajes a su hijo Borja, con el que mantiene una tensa relación que tiene por origen la herencia del joven y como aliciente, el reclamo de dos obras del museo: una de Goya y otra de Giaquinto. "Borja no va a tener de momento esas piezas.
Y la cuerda se sigue tensando. Ya no sólo por la nueva forma que desarrolla Carmen Thyssen para hacer palanca en el Gobierno para (probablemente) activar un diálogo -quizá en punto muerto- sobre el futuro de su colección...
Tita Cervera: 'Mi hijo está en una secta'
Los elefantes de adorno son de los roscones de reyes y los daditos de encima de la mesa formaba parte de un llavero.
Las banquetas blancas y la mesa rosa estan hecho por mi, el resto de los muebles de la habitación del bebe son comprados.
El baúl de los juquetes era un baulito que me regalaron para adorno y lo he trasformado pintandolo y decorandole con motivos infantiles.
¡Bueno ya veo que lo llevais muy bien!, aunque casi no me da tiempo a leeros.
Mañana en otro ratillo os veo, y ánimo, que está muy interesante el foro.