Este descubrimiento es toda una sorpresa ya que estudios anteriores habían demostrado que los animales domésticos sí reaccionaban días antes a los seísmos y podían predecirlos, pero nunca antes se había observado esta actitud en animales salvajes.
Animales domésticos
Los sapos volvieron al lugar seis días después del terremoto ya que la doctora encontró huevos tres días antes del seísmo pero ninguno en los días anteriores al suceso ni tampoco los seis días posteriores.
Puesta de huevos
Una desaparición extraña ya que los machos suelen permanecer en el lugar varios días después de la cópula hasta que la puesta de huevos haya finalizado.
Huída precipitada
De esto se dio cuenta la doctora Grant, que se encontraba en el lagoSan Ruffino realizando un estudio sobre dichas colonias y vio cómo el 96% de los sapos machos habían desaparecido.
Y no fue una huída precipitada. No, las colonias de sapo comenzaron a abandonar la región de Los Abruzos tres días antes de que el terremoto golpeara la zona.
Tres días antes
En total, las colonias de sapo común se redujeron en un 96% en un radio de 74 kilómetros desde el epicentro del temblor.
Salieron huyendo
Según se publica en el Journal of Zoology, los sapos del lugar huyeron del epicentro y de los alrededores.
