Luengas lenguas hacen falta para no trabalenguarse.
El que no tenga una luenga lengua bien podrá trabalenguarse Y Rubén coge la marioneta y va detras de ella. Cada vez que la ve, se asuta y se pone a llorar. A la que no le ha gustado nada la marioneta ha sido a Celia. Las marionetas estan muy logradas, muchisimo mejor que algunas que venden.