Alicia y Pato se asomaron nerviosas a la ventana para escudriñar los departamentos vecinos mientras las más pequeñas lloraban abrazadas.
De pronto escucharon el sonido del ascensor que arrancaba. Corrieron a pegar el oído contra la puerta y corrieron la tranca. Escucharon abrirse la puerta y pasos en el palier.
Contuvieron la respiración con esfuerzo.
De pronto escucharon el sonido del ascensor que arrancaba. Corrieron a pegar el oído contra la puerta y corrieron la tranca. Escucharon abrirse la puerta y pasos en el palier.
Contuvieron la respiración con esfuerzo.