En 1974, una joven diseñadora de Sanrio llamada Yuko Shimizu, creó a Kitty, y le dio un look simple, cabeza redondeada, nariz de botón y un lazo rojo sobre una de sus orejas. Omitió la boca, y eso convirtió a Kitty en una presencia internacional porque habla con el lenguaje del corazón, según sus creadores.