ALBARES: Corría el año 1443 y Agnes era una auténtica belleza:...
Corría el año 1443 y Agnes era una auténtica belleza: rostro redondeado, ojos dulces, boca pequeña, cabellos sedosos y, sobre todo, un cuello largo y recto, como el de un cisne. El rey, nada más verla, se dio cuenta de que era el amor de su vida.