Si los señores de la casa estaban, cuando llegábamos al domicilio de éstos, el personal de servicio que nos abría la puerta nos preguntaba de parte de quien (a quien anunciaban) y en ese momento se les daba nuestra tarjeta de visita para que se la llevasen a los señores de la casa. Por supuesto, que este paso solo se realizaba la primera vez que se iba a una casa.