Según la Organización Mundial de la Salud, cada año mueren 40.000 personas mordidas por serpientes. Estudios recientes han demostrado que estos reptiles podrían ser mucho más letales, y es que las serpientes pueden decidir voluntariamente si inyectan veneno o no. Y no sólo las personas son víctimas de las serpientes: miles de mascotas son agredidas anualmente, de las cuales el 20 % mueren, la mayoría perros y gatos. En los Estados Unidos existen cursos de primeros auxilios especialmente dedicados a las mascotas.