Primera Dama desde 1974 a 1977 por su matrimonio con Gerald Ford, que fue el 38º presidente de los Estados Unidos. Fue fundadora y presidenta del Centro Betty Ford para adictos a las drogas. Tenía una mentalidad muy abierta y dejaba constancia de ello en las numerosas entrevistas y apariciones en programas de radio y televisión, donde se declaró a favor de los beneficios del tratamiento psiquiátrico, del uso de la marihuana y del sexo premarital.