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ALGUNOS ASPECTOS SOBRE LA CONSTRUCCIÓN DE LA IGLESIA DE SAN
ESTEBAN DE ALBARES.
Del resto de ermitas poco podemos añadir, únicamente recalcar que ya desde el siglo XVI son constantes las protestas de los visitadores ante el poco interés que el Concejo muestra hacia ellas, como poseedor de la mayor parte, debido a que se encuentran en permanente mal estado.
Ante el continuo deterioro de estas ermitas y viendo la necesidad de un arreglo rápido, el visitador del año 1601, vio que lo mejor para resolver el problema era nombrar para cada una de ellas un mayordomo que se encargara de buscar las limosnas necesarias para su arreglo. Para ello nombró a los siguientes mayordomos:
- De San Sebastián, a Roque Ranoso.
- De Santa Bárbara, a Alonso Blanco.
- De San Antonio, a Alonso Sánchez y Lorente Martínez.
- De San Cristóbal, a Juan de Gabriel Manzano.
- De Santa Ana, a Sebastián de Gárgoles.
- De Santa Catalina, a Pedro Fernández, clérigo.
No se dice nada al respecto del humilladero de la Concepción.
ESTEBAN DE ALBARES.
Del resto de ermitas poco podemos añadir, únicamente recalcar que ya desde el siglo XVI son constantes las protestas de los visitadores ante el poco interés que el Concejo muestra hacia ellas, como poseedor de la mayor parte, debido a que se encuentran en permanente mal estado.
Ante el continuo deterioro de estas ermitas y viendo la necesidad de un arreglo rápido, el visitador del año 1601, vio que lo mejor para resolver el problema era nombrar para cada una de ellas un mayordomo que se encargara de buscar las limosnas necesarias para su arreglo. Para ello nombró a los siguientes mayordomos:
- De San Sebastián, a Roque Ranoso.
- De Santa Bárbara, a Alonso Blanco.
- De San Antonio, a Alonso Sánchez y Lorente Martínez.
- De San Cristóbal, a Juan de Gabriel Manzano.
- De Santa Ana, a Sebastián de Gárgoles.
- De Santa Catalina, a Pedro Fernández, clérigo.
No se dice nada al respecto del humilladero de la Concepción.