Madrid, 5 sep. 2009
Soy una madre de un niño de 6 años y de gemelas de 4 meses (Sheila y Nadalina).
Estando de vacaciones en un pueblo de Guadalajara (Naharros), mis hijas se pusieron malas con un brote de alergia a la leche de vaca. Nos fuimos a Atienza, que es donde está el centro médico.
Como eran las 10 de la noche, sólo hay un médico de medicina general y un enfermero, que no son especialistas de bebes. Como la cosa se complico y una de ellas se puso peor, pedimos una ambulancia y bajamos a Guadalajara, pero hasta ese momento, si no es por la profesionalidad del médico, que se llama Plinio y del enfermero Antonio, no que hubiera pasado.
Muchas gracias, por el trato recibido y por lo segura que me sentí, también agradecerle a los de la ambulancia y al hospital de Guadalajara.
Agradecimiento especial a todos los médicos y enfermeros que pasan su vida profesional en pueblos.
Nadalina Díaz – Javier Moreno.
Soy una madre de un niño de 6 años y de gemelas de 4 meses (Sheila y Nadalina).
Estando de vacaciones en un pueblo de Guadalajara (Naharros), mis hijas se pusieron malas con un brote de alergia a la leche de vaca. Nos fuimos a Atienza, que es donde está el centro médico.
Como eran las 10 de la noche, sólo hay un médico de medicina general y un enfermero, que no son especialistas de bebes. Como la cosa se complico y una de ellas se puso peor, pedimos una ambulancia y bajamos a Guadalajara, pero hasta ese momento, si no es por la profesionalidad del médico, que se llama Plinio y del enfermero Antonio, no que hubiera pasado.
Muchas gracias, por el trato recibido y por lo segura que me sentí, también agradecerle a los de la ambulancia y al hospital de Guadalajara.
Agradecimiento especial a todos los médicos y enfermeros que pasan su vida profesional en pueblos.
Nadalina Díaz – Javier Moreno.