Es una pena que el
pueblo se quede tan solo con las nieves. Todas esas personas que lo visitan en
verano, ¿Donde están en
invierno?.
Hay que hacer algo con esas tardes grises y de frio.
Yo recuerdo mi niñez en dribes, y no importaba que hiciera frio o calor siempre estabamos deseando que llegara el viernes para ir.