Quién quiere en El Cardoso ser madrileño?
El alcalde asegura que no ha pedido incorporarse a nuestra Comunidad
MARTA ARROYO
Corresponsal
EL CARDOSO.- Les gustaría cambiar la bandera rojiblanca por la de las siete estrellas, pero nunca enviaron una carta a Alberto Ruiz-Gallardón solicitando ser madrileños. La supuesta petición del municipio alcarreño de El Cardoso de la Sierra de pasar a depender de la Puerta del Sol fue una «inocentada» que el Gobierno regional de Madrid se ha apresurado a denegar.
El Ejecutivo no está por la labor de reclamar una modificación de los límites territoriales existentes entre Madrid y Castilla-La Mancha. Así lo manifestó el propio Ruiz-Gallardón el pasado jueves trás el Consejo de Gobierno, aunque al parecer nadie se lo ha pedido.
El alcalde de El Cardoso, el independiente Rafael Heras, niega que sea suya la rúbrica que aparece en la misiva remitida al presidente madrileño. «Algún iluminado ha falsificado mi firma pensando que así se iban a resolver nuestros problemas», explicó el regidor.
El alcalde de esta pequeña localidad alcarreña se mostró ayer muy sorprendido por la reaccion del Gobierno de Madrid a un escrito en el que no figura el membrete del Ayuntamiento de El Cardoso.
El consejero de Presidencia, Manuel Cobo, ha restado importancia a este hecho. «Fue simplemente una respuesta política a la carta puntual de un alcalde, al que no le vamos a pedir una prueba caligráfica», declaró el consejero.
«Si hubiera ido acompañada de un acuerdo plenario habríamos iniciado un expediente administrativo para enviarlo al Gobierno castellanomanchego, denegando su solicitud», añadió.
Bromas aparte, el polémico escrito del que nadie se responsabiliza esconde una gran verdad. Los 97 vecinos que residen en los seis barrios que integran este pueblo de la sierra de Ayllón: el Cardoso, Bocígano, Colmenar de la Sierra, Corralejo, Cabida y Peñalba se sienten abandonados por el Gobierno de José Bono.
Según ellos, no tienen trasporte público, el reparto de gas se realiza una vez al mes y la Guardia Civil está a una hora y media de distancia.
Para colmo de males, la escuela pende de un hilo. Sólo tiene cinco alumnos y si la cifra se reduce tendrá que cerrar.
Sin embargo, a sólo 12 kilómetros, el municipio madrileño de Montejo de la Sierra es la otra cara de la moneda. El butano pasa dos veces por semana, el pan, a diario y el autobús, varias veces al día.
Mientras la población de la Sierra Norte madrileña aumenta cada año, la de la comarca de El Cardoso disminuye. Hace dos años, un farmaceútico decidió instalarse en el pueblo con la ayuda del Ayuntamiento. Sólo aguantó un año. El negocio no era rentable para alimentar a una familia numerosa y se marchó.
El propio alcalde reside en La Cabrera para que sus hijos puedan estudiar. «Los niños no pueden estar todo el día en la carretera» se justifica el primer edil.
Los únicos que se aferran a la tierra son los siete hijos de doña Gabina, la propietaria del único comercio del pueblo. «Trabajan con la madera y con el ganado pero es muy duro. Estoy orgullosa de ser de Guadalajara pero a efectos prácticos es mejor ser de Madrid», concluye mirando de reojo al regidor.
Rafael Heras responde con una pregunta ¿A quién no le gustaría ir a la Luna? De momento, tendrá que conformarse con acuerdos puntuales como el que le ha arrancado a Manuel Cobo. Hasta ahora, los helicópteros del Sercam no atendían las urgencias de este municipio. A partir de ahora, lo harán sin necesidad de que los vecinos tengan que recurrir a la picaresca de trasladar a los enfermos hasta la cercana frontera provincial.
-
Más deseos de adhesión
El deseo de cambiar de autonomía no es algo exclusivo de El Cardoso. El trazado de las fronteras provoca situaciones muy peculiares sobre las que los gobiernos de uno y otro lado prefieren no pronunciarse. Al municipio segoviano de El Espinar no le disgustaría que el cercano núcleo de La Cepeda, perteneciente a Santa María de la Alameda, volviera a esta provincia. En La Granja, se encuentra parte de la estación de esquí de Navacerrada y el pueblo madrileño de Valdeavero rodea una esquina de tierra totalmente alcarreña. La solución de estos caprichos cartográficos sentaría un precedente de imprecedibles consecuencias. Lo primero que haría falta para ello sería necesario un acuerdo plenario del Ayuntamiento que solicite la integración en otra provincia.
-
¿ Recomendaría
Este artículo?
Copia para
IMPRIMIR
[GoogleBarVIP= 29].
El alcalde asegura que no ha pedido incorporarse a nuestra Comunidad
MARTA ARROYO
Corresponsal
EL CARDOSO.- Les gustaría cambiar la bandera rojiblanca por la de las siete estrellas, pero nunca enviaron una carta a Alberto Ruiz-Gallardón solicitando ser madrileños. La supuesta petición del municipio alcarreño de El Cardoso de la Sierra de pasar a depender de la Puerta del Sol fue una «inocentada» que el Gobierno regional de Madrid se ha apresurado a denegar.
El Ejecutivo no está por la labor de reclamar una modificación de los límites territoriales existentes entre Madrid y Castilla-La Mancha. Así lo manifestó el propio Ruiz-Gallardón el pasado jueves trás el Consejo de Gobierno, aunque al parecer nadie se lo ha pedido.
El alcalde de El Cardoso, el independiente Rafael Heras, niega que sea suya la rúbrica que aparece en la misiva remitida al presidente madrileño. «Algún iluminado ha falsificado mi firma pensando que así se iban a resolver nuestros problemas», explicó el regidor.
El alcalde de esta pequeña localidad alcarreña se mostró ayer muy sorprendido por la reaccion del Gobierno de Madrid a un escrito en el que no figura el membrete del Ayuntamiento de El Cardoso.
El consejero de Presidencia, Manuel Cobo, ha restado importancia a este hecho. «Fue simplemente una respuesta política a la carta puntual de un alcalde, al que no le vamos a pedir una prueba caligráfica», declaró el consejero.
«Si hubiera ido acompañada de un acuerdo plenario habríamos iniciado un expediente administrativo para enviarlo al Gobierno castellanomanchego, denegando su solicitud», añadió.
Bromas aparte, el polémico escrito del que nadie se responsabiliza esconde una gran verdad. Los 97 vecinos que residen en los seis barrios que integran este pueblo de la sierra de Ayllón: el Cardoso, Bocígano, Colmenar de la Sierra, Corralejo, Cabida y Peñalba se sienten abandonados por el Gobierno de José Bono.
Según ellos, no tienen trasporte público, el reparto de gas se realiza una vez al mes y la Guardia Civil está a una hora y media de distancia.
Para colmo de males, la escuela pende de un hilo. Sólo tiene cinco alumnos y si la cifra se reduce tendrá que cerrar.
Sin embargo, a sólo 12 kilómetros, el municipio madrileño de Montejo de la Sierra es la otra cara de la moneda. El butano pasa dos veces por semana, el pan, a diario y el autobús, varias veces al día.
Mientras la población de la Sierra Norte madrileña aumenta cada año, la de la comarca de El Cardoso disminuye. Hace dos años, un farmaceútico decidió instalarse en el pueblo con la ayuda del Ayuntamiento. Sólo aguantó un año. El negocio no era rentable para alimentar a una familia numerosa y se marchó.
El propio alcalde reside en La Cabrera para que sus hijos puedan estudiar. «Los niños no pueden estar todo el día en la carretera» se justifica el primer edil.
Los únicos que se aferran a la tierra son los siete hijos de doña Gabina, la propietaria del único comercio del pueblo. «Trabajan con la madera y con el ganado pero es muy duro. Estoy orgullosa de ser de Guadalajara pero a efectos prácticos es mejor ser de Madrid», concluye mirando de reojo al regidor.
Rafael Heras responde con una pregunta ¿A quién no le gustaría ir a la Luna? De momento, tendrá que conformarse con acuerdos puntuales como el que le ha arrancado a Manuel Cobo. Hasta ahora, los helicópteros del Sercam no atendían las urgencias de este municipio. A partir de ahora, lo harán sin necesidad de que los vecinos tengan que recurrir a la picaresca de trasladar a los enfermos hasta la cercana frontera provincial.
-
Más deseos de adhesión
El deseo de cambiar de autonomía no es algo exclusivo de El Cardoso. El trazado de las fronteras provoca situaciones muy peculiares sobre las que los gobiernos de uno y otro lado prefieren no pronunciarse. Al municipio segoviano de El Espinar no le disgustaría que el cercano núcleo de La Cepeda, perteneciente a Santa María de la Alameda, volviera a esta provincia. En La Granja, se encuentra parte de la estación de esquí de Navacerrada y el pueblo madrileño de Valdeavero rodea una esquina de tierra totalmente alcarreña. La solución de estos caprichos cartográficos sentaría un precedente de imprecedibles consecuencias. Lo primero que haría falta para ello sería necesario un acuerdo plenario del Ayuntamiento que solicite la integración en otra provincia.
-
¿ Recomendaría
Este artículo?
Copia para
IMPRIMIR
[GoogleBarVIP= 29].
