La
estación fue inaugurada el 5 de octubre de 1860 con la apertura del tramo
Guadalajara-Jadraque de la línea férrea
Madrid-
Zaragoza por parte de la Compañía de los Ferrocarriles de Madrid a Zaragoza y
Alicante.
Está formada por una estructura de planta baja con cubierta en raso y disposición lateral a la
vía. Su
fachada principal -el otro lado de la edificación- posee siete huecos repartidos entre
puertas de acceso al recinto y cuatro
ventanas rectangulares. Aún conserva parte de su señalización de origen realizada con
cerámica blanca y azul.
Cuenta con dos andenes, uno lateral y otro central y cinco
vías numeradas. La vía 3 accede al andén lateral mientras que las vías 1 y 2 lo hacen al andén central. Las vías 4 y 6 se sitúan frente al
edificio de viajeros y son derivaciones de la vía 2 usadas como vías muertas. La vía 5 fue desmantelada y no aparece en la numeración.