MOCHALES
Arrancando la penultima hoja del calendario del mes enero, el día 30 dejó la tiriste noticia del fallecmiento de nuestro amigo e hijo de Mochales, Gaudencio García García, a los 91 años, en el Hospital Universitario de Guadalajara.
Son muchos los recuerdos que deja, a cuantos hemos compartido largos momentos en su compañia. El último, el 24 de julio, fiesta de la Beata, una de las tres mártires carmelitas asesinadas durante la Guerra Civil, su hermana, a la que se volcó enteramente, como decía, "Quiero dejarla bien equipada".
Amante de su pueblo de Mochales y de su iglesia, donde el retablo de la Beata ha quedado para la eternidad. Vidrieras en los muros del templo y ornamentos litúrgicos estarán en su recuerdo y de su esposa Felisa, uniéndonos al dolor, mostrando nuestro más sentido pésame.
En mi álbum guardo las fotografias del viaje a Roma, con motivo de la beatificación junto a otras de nuestros encuetros en Mochales. Gaudencio era también hermano de don Julián García, que fuese párroco emblemático de la iglesia de San Ginés y estuvo muy ligado a la Ciudad del Doncel, donde tenía casa frente a la Catedral y pasaba largas temporadas. Allí hace un par de años donó el órgano restaurado a la Catedral y en la parroquia de San Pedro se celebró su funeral en la tarde del 31 de enero. Concelebraron quince sacerdotes como a él le hubieses gustado. D. E. P.
N. A. 13-2-2015
Arrancando la penultima hoja del calendario del mes enero, el día 30 dejó la tiriste noticia del fallecmiento de nuestro amigo e hijo de Mochales, Gaudencio García García, a los 91 años, en el Hospital Universitario de Guadalajara.
Son muchos los recuerdos que deja, a cuantos hemos compartido largos momentos en su compañia. El último, el 24 de julio, fiesta de la Beata, una de las tres mártires carmelitas asesinadas durante la Guerra Civil, su hermana, a la que se volcó enteramente, como decía, "Quiero dejarla bien equipada".
Amante de su pueblo de Mochales y de su iglesia, donde el retablo de la Beata ha quedado para la eternidad. Vidrieras en los muros del templo y ornamentos litúrgicos estarán en su recuerdo y de su esposa Felisa, uniéndonos al dolor, mostrando nuestro más sentido pésame.
En mi álbum guardo las fotografias del viaje a Roma, con motivo de la beatificación junto a otras de nuestros encuetros en Mochales. Gaudencio era también hermano de don Julián García, que fuese párroco emblemático de la iglesia de San Ginés y estuvo muy ligado a la Ciudad del Doncel, donde tenía casa frente a la Catedral y pasaba largas temporadas. Allí hace un par de años donó el órgano restaurado a la Catedral y en la parroquia de San Pedro se celebró su funeral en la tarde del 31 de enero. Concelebraron quince sacerdotes como a él le hubieses gustado. D. E. P.
N. A. 13-2-2015