El
lavadero, cuantos momentos de Paz y sosiego he encontrado en el, el sitio apropiado donde meterse y resguardarse del Sol, echar los primeros cigarros de
juventud y beber el mejor
agua que he bebido nunca, de ese
caño, que es como un prodigio del Señor.
El olor a jabón natural de Sosa, que es una cosa que yo me lo comeria y me gustaria volver a tener entre mis manos.
Un Salud, también a todos mis
amigos de aquella epoca Manoly, Helena Angelines, Javi, Juan Carlos, Pepito, Julián , por supuesto
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