Hace muchos años que no he vuelto por Prádena. Supongo que habitualemmente seran pocos los que vivan de contínuo, aunque fines de semana y verano volverán los allí nacidos y otros.
Fue un pueblo que siempre me cautivó: tan metido entre las preciosas montañas del Santo Alto Rey de la Majestad. En varias ocasiones he subido desde Albendiego, atravesando praderas y riachuelos, hondonadas y crestas pintiagudas.
Espero que este verano pueda acercarme, de nuevo desde Albendiego, a donde voy a regresar durante quince días.
Un saludo afectuoso.
Fue un pueblo que siempre me cautivó: tan metido entre las preciosas montañas del Santo Alto Rey de la Majestad. En varias ocasiones he subido desde Albendiego, atravesando praderas y riachuelos, hondonadas y crestas pintiagudas.
Espero que este verano pueda acercarme, de nuevo desde Albendiego, a donde voy a regresar durante quince días.
Un saludo afectuoso.