Habité durante siglos y siglos,
ancestrales cuevas que estudiáis hoy;
copié del fuego rojos resplandores,
tintes de sangre de fieras audaces.... A LAS CUEVAS DE LOS CASARES
Viví dando cobijo a infinidad de sueños
sumida en la profunda caverna de mi tierra
donde fui alumbrada para mi nacimiento.
El soplo de la vida me iluminó en la sierra... Lamento, que hoy en el siglo XXI, algunos que se dicen Naturalistas vayan al monte -con la enorme sequia- a hacerse unas chuletas. Vergüenza me da. Uno de los forestales muertos era compañero de juegos de mi infancia. Un abrazo emocionado para todos ellos.
A la Junta, por favor al repoblar, plantar también encinas, sabinas. Etc. Estoy de acuerdo contigo JJ. Y, aunque todavía siento dolor e infinita tristeza, aún me queda rabia en el alma para denunciar las declaraciones vergonzosas y las acusaciones cruzadas de los políticos.
Escribo desde Grazalema, donde en septiemebre del 1992 murieron cinco trabajadores de un retén. A día de hoy ni se han producido detenciones ni dimisiones.
Mi apoyo y mi cariño para vosotros. CONCHA.