Nunca supe que esta
casa era la del herrero, pero bien que me acuerdo de esta
calle. A la izquierda quedaba la hijón, que tenía que recorrer de
noche para volver a casa porque no había farolas. A la derecha, el
lavadero, la
piscina de
riosalido. Quien nunca se cayó en ella no sabe lo fria que está el
agua!!