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! Hola! Gentes de mi pueblo! Y naturalmente a los que no lo son, tales como Loli, María y alguno, mas, así como los ausentes. Y...-! faltaría mas!- compañeros de juegos, y retoños de estos. Mi particular, saludo a Mariano, que me hace recordar, que si, que intento poner rostro, a quienes habitaron la casa de la esquina, al lado del ayuntamiento. Y que doña Pepita, escarbo en mi recuerdo, y aparecen leves reflejos. Y...! Claro, el "brozas"! Justo es recordar que en nuestro pueblo todas las familias tenían algún apodo, o mote, como lo llamaban nuestros abuelos.
Después de mis saludos, escarbo en algún que otro de estos motes, y como hoy, me apetece, dar una vuelta, por alguna escapada, cuando dejara de ser aquel muchacho tímido, y a veces solitario (eso sí rebelde siempre) y "hacer una visita" al Río Tajuña... acompañado de recuerdos.
JUGANDO A NO SER NIÑOS
A veces uno esta solo:
solo con sigo mismo
y parece de pronto
aquello que se ha ido.
A veces estoy solo
y me digo y me desdigo
en los días umbrosos:
ese fue mi destino.
atrapo lo mas bello
y me digo:! estoy vivo!
Me voy al pasado y pongo
en el silencio, erguido
mi recuerdo en los chopos
hermosos junto al río,
y hurgo los rescoldos
desde este pecho mío.
Y balbuceó a fondo...
"tal vez la he querido"
Tal vez la estuve amando.
Tal vez fui mas que amigo...
Y, por eso, mi costado
aumenta sus latidos.
Se que amo su recuerdo
entre brisas y trigos,
como amo los campos
-aquellos campos míos-
y los pájaros, y sus trinos.
Y los besos! que besos
cuando aún se es chiquillo!
Me duele recordarlo
-! de eso hace tantos siglos!-
Me duele y remediarlo
! Jamas!- me lo repito-
porque tal vez la hube amado
y nunca lo he sabido.
Se que desconcertado
en sueños me cobijo
y galopa mi costado
aumentando su ritmo.
Y siento que sus labios
se unen a los míos...
Y siento que mi cuerpo
temblaba indeciso.
Y gozo de sus brazos
muy fuerte a mi ceñidos.
y respiro su aliento...
vencido. Y muy vencidos
buscando cielos nuevos:
jugando a no ser niños.
J. M (Libertad)
Después de mis saludos, escarbo en algún que otro de estos motes, y como hoy, me apetece, dar una vuelta, por alguna escapada, cuando dejara de ser aquel muchacho tímido, y a veces solitario (eso sí rebelde siempre) y "hacer una visita" al Río Tajuña... acompañado de recuerdos.
JUGANDO A NO SER NIÑOS
A veces uno esta solo:
solo con sigo mismo
y parece de pronto
aquello que se ha ido.
A veces estoy solo
y me digo y me desdigo
en los días umbrosos:
ese fue mi destino.
atrapo lo mas bello
y me digo:! estoy vivo!
Me voy al pasado y pongo
en el silencio, erguido
mi recuerdo en los chopos
hermosos junto al río,
y hurgo los rescoldos
desde este pecho mío.
Y balbuceó a fondo...
"tal vez la he querido"
Tal vez la estuve amando.
Tal vez fui mas que amigo...
Y, por eso, mi costado
aumenta sus latidos.
Se que amo su recuerdo
entre brisas y trigos,
como amo los campos
-aquellos campos míos-
y los pájaros, y sus trinos.
Y los besos! que besos
cuando aún se es chiquillo!
Me duele recordarlo
-! de eso hace tantos siglos!-
Me duele y remediarlo
! Jamas!- me lo repito-
porque tal vez la hube amado
y nunca lo he sabido.
Se que desconcertado
en sueños me cobijo
y galopa mi costado
aumentando su ritmo.
Y siento que sus labios
se unen a los míos...
Y siento que mi cuerpo
temblaba indeciso.
Y gozo de sus brazos
muy fuerte a mi ceñidos.
y respiro su aliento...
vencido. Y muy vencidos
buscando cielos nuevos:
jugando a no ser niños.
J. M (Libertad)
