VILLEL DE MESA
EL ARCO DE LA PLAZA DE MI PUEBLO
Cuanta historia tiene el Arco de la Plaza de Mi Pueblo, que todo el mundo no sabe contar, pero cuanta historia se le añade, cuanto en los archivos no se puede encontrar. Le llaman Arco Romano, o bien puede ser de "estilo romano", sea lo que sea, es arco mas bonito que he visto en todo el valle.
Es un pueblo con distintos arcos, que se pueden contemplar por las calles de la capital, si entramos por la calle del Medio Celemin, nos quedaremos admirados de otro, hemano del que hablamos de la plaza. Está antes de entrar a la casa de la familia Calpe ( allí vivió Saturnino y su hermana Julia), allí quedó el arco, que la historia nos ha dejado, una entrada que tenia el pueblo, cuando sus murallas lo cerraban. Y nos subimos por la majadilla, otros angulos hacen de arcos, a las entradas de la placilueta, de Consuelo y Ricardo. Cuantos arcos tiene la vida y cuantos arcos pasamos de largo, pero hay en la plaza el mismo arco, donde nos cuenta la leyenda, que tambien hubo ahorcados. Si allí, y en el cerro de la horca. Eran tiempos peores, cuando mandaban en tierras y vidas los mandamases, eran aquellos siglos que nuetro pueblo oprimido, nada valia su vida, nada valia su muerte.
El Arco de la Plaza, junto a él estaba la fragua y el fronton de pelota, ahora le rodea, los jardines y una fuente con peces y sombras y flores y niños que juegan al recreo y mayores en descanso. El Arco de la Plaza, es fiel testigo de todo cuanto en el puente pequeño, sentamos a la sombra, se habla. Allí, se hacen las críticas y comentarios, se elevan a las personas, allí se tira de la soga hasta que se caiga. Es un lugar de comentarios, es, un lugar de pasar el rato porque, otro lugar, no existe, que no sea mirando al "Arco Romano".
Pero el Arco, ya tiene muchos años, y sus pies no le aguantan, decian que lo
Iban a "remozarlo". Falta le hace, y él espera, para vivir muchos años, serán las proximas generaciones, que le contemplen y le sigan hablando, porque, solo él, guarda los secretos, de lo que tanto se ha hablado.
El Arco Romano, es un signo de gloria de nuestro pueblo, por haber vivido tantos años, una satisfación para la capital, porque todo el mundo le admira, un orgullo para sus hijos, porque, por él, todos pasaron, con sus caballerias a la fragua y las jovenes a por agua, a la fuente, cuando aún no había en las casas, y los mozos en el puente les esperaban. Aquellas miradas, aquellos silencios, todos esperaban, porque los cantaros y botijos , todos iban llenos de agua, pero las jovenes llenas de esperanzas.
Contemplaré el Arco Romano y un día les hablaré a mis nietos, como mis abuelos hicieron, les conteré mas historias, que el Arco ha soñado, les diré, que cuando su abuelito no esté, ellos sigan hablando y contemplado al mejor Arco Romano, que es, el de MI PUEBLO.
(30 de enero 2007, comentario de un hijo del pueblo).
EL ARCO DE LA PLAZA DE MI PUEBLO
Cuanta historia tiene el Arco de la Plaza de Mi Pueblo, que todo el mundo no sabe contar, pero cuanta historia se le añade, cuanto en los archivos no se puede encontrar. Le llaman Arco Romano, o bien puede ser de "estilo romano", sea lo que sea, es arco mas bonito que he visto en todo el valle.
Es un pueblo con distintos arcos, que se pueden contemplar por las calles de la capital, si entramos por la calle del Medio Celemin, nos quedaremos admirados de otro, hemano del que hablamos de la plaza. Está antes de entrar a la casa de la familia Calpe ( allí vivió Saturnino y su hermana Julia), allí quedó el arco, que la historia nos ha dejado, una entrada que tenia el pueblo, cuando sus murallas lo cerraban. Y nos subimos por la majadilla, otros angulos hacen de arcos, a las entradas de la placilueta, de Consuelo y Ricardo. Cuantos arcos tiene la vida y cuantos arcos pasamos de largo, pero hay en la plaza el mismo arco, donde nos cuenta la leyenda, que tambien hubo ahorcados. Si allí, y en el cerro de la horca. Eran tiempos peores, cuando mandaban en tierras y vidas los mandamases, eran aquellos siglos que nuetro pueblo oprimido, nada valia su vida, nada valia su muerte.
El Arco de la Plaza, junto a él estaba la fragua y el fronton de pelota, ahora le rodea, los jardines y una fuente con peces y sombras y flores y niños que juegan al recreo y mayores en descanso. El Arco de la Plaza, es fiel testigo de todo cuanto en el puente pequeño, sentamos a la sombra, se habla. Allí, se hacen las críticas y comentarios, se elevan a las personas, allí se tira de la soga hasta que se caiga. Es un lugar de comentarios, es, un lugar de pasar el rato porque, otro lugar, no existe, que no sea mirando al "Arco Romano".
Pero el Arco, ya tiene muchos años, y sus pies no le aguantan, decian que lo
Iban a "remozarlo". Falta le hace, y él espera, para vivir muchos años, serán las proximas generaciones, que le contemplen y le sigan hablando, porque, solo él, guarda los secretos, de lo que tanto se ha hablado.
El Arco Romano, es un signo de gloria de nuestro pueblo, por haber vivido tantos años, una satisfación para la capital, porque todo el mundo le admira, un orgullo para sus hijos, porque, por él, todos pasaron, con sus caballerias a la fragua y las jovenes a por agua, a la fuente, cuando aún no había en las casas, y los mozos en el puente les esperaban. Aquellas miradas, aquellos silencios, todos esperaban, porque los cantaros y botijos , todos iban llenos de agua, pero las jovenes llenas de esperanzas.
Contemplaré el Arco Romano y un día les hablaré a mis nietos, como mis abuelos hicieron, les conteré mas historias, que el Arco ha soñado, les diré, que cuando su abuelito no esté, ellos sigan hablando y contemplado al mejor Arco Romano, que es, el de MI PUEBLO.
(30 de enero 2007, comentario de un hijo del pueblo).