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VILLEL DE MESA: VILLEL DE MESA...

VILLEL DE MESA

EL TEMPORAL DEJÓ UNA BONITA ESTAMPA EN EL VALLE DEL MESA.

SUS HABITANTES YA DISPONEN DE COMUNICACIÓN DIARIA CON MOLINA DE ARAGÓN.

Un espectáculo maravilloso que nos ha ofrecido el primer mes del año, bajo un blanquiísimo y deslumbrante manto de nieve, nos ha obligado necesariamente a recluirnos en casa saboreando el calor del brasero o de la estufa, con aquella conversación amena y distendida, colmada de recuerdos, que nos devuelven la vida y nos permite recuperar el diáologo siguiendo las partidas de la baraja en los salones de encuentro. Lugares de acogida para todos donde se abren las puertas en el Hogar del Jubilado, El bar el Chato y la Peña de la Asociación de Amigos. La lluvia y copos de nieve han ido dando un aspecto realmente hermoso y colorido. Nieve generosa que, de cumplirse el refranero popular de nuestros mayores "año de nieves, año de bienes".

La madre naturaleza premia a nuestra tierra el alimento necesario para que las semillas sembradas por nuestros agricultores, produzcan en el ciento por uno. Las primeras flores brotaran de las ramas de los almendros seguidas de los cerezos, y bajo las buenas temperaturas que nuestro valle pueda recibir, esperamos unos buenos y cuantiosos buenos productos.

Enero nos ha enseñado a bajar la cuesta en vez de subir nuestras ilusiones. Nos va situando en los principios de la realidad de aquellos tiempos de los años 50, cuando nuestros antepsaados espereranzadamente siempre miraban a lo alto en espera de la protección de sus campos, más seguro que esperar las promesas de los expertos que han movido la economía con promesas engañosas.

La alegría también llegó como un regalo de Navidad, pues ahora tenemos la posibilidad de comunicarnos diariamente con Molina de Aragón. Victoriano García García, puesto al volante del coche de la línea de la Junta, es quien hace su recorrido por los pueblos desde Algar, hasta llegar a Molina y que facilita el traslado cada semana a los alumnos que cursan sus estudios en el Instituto y a las personas que tengan la necesidad.

Salvando las inclemencias del tiempo, nos deja una triste noticia para los hijos de Villel, al asistir al funeral y posterior acompañamiento hasta el cementerio, para darle cristiana sepultura a nuestro amigo Santiago Gonzalo Torrubiano. Cuantos asistieron acompañaron en el gran dolor a su esposa, hijos, hermanos y familiares, quienes agradecen su presencia y sus oraciones.

Crónica en el diario de Nueva Alcarria 23 Enero 2009, pág. 27.