VILLEL DE MESA
CRÓNICA EN EL DIARIO DE NUEVA ALCARRIA, 11 de Mayo de 2007.
TIEMPO DE LABRADORES Y PESCADORES.
EL MES DE MAYO SE HA PRESENTADO EN EL VALLE CON GRAN ACTIVIDAD.
Fe y tradición se unen durante el mes de mayo para elevar oraciones. Días que van pasando, considerados como los mas largos del año, colmados de alegría por la lluvia que regaron nuestras tierras donde crecen los cereales y abunda la confianza en el tiempo para recoger las buenas cosechas.
Y la tradición. Llegar hasta la ermita de Jesús Nazareno, durante nueve días y el sábado 19, celebrar de Mañana la Eucaristía y a continuación en procesión se traslada la imagen de Jesús Nazareno a la iglesia parroquial, que permanece hasta el mes de septiembre. Nueve días que las feligresas han dedicado, este año, a dar gracias al Señor, por la lluvia enviada y en los años de sequía rogando que llegue.
Y lejos de mi infancia se unen los recuerdos en la fe con la novena <que tradicionalmente fueron conocidas por las "Flores de María">, ante la imagen de la Inmaculada, coronada de flores.
Un pueblo de labradores que hace más de 40 años viene celebrando la festividad de San Isidro Labrador y que por aquellos tiempos siendo el jefe de la Hermandad de Labradores, LIDIO OCHOA HERNANDEZ y párroco ENRIQUE HERRAN MARTÍNEZ, por primera vez fijó la fiesta en honor al patron de los labradores. El día 15 de Mayo se celebra una misa en la iglesia parroquial, siguiendo con la tradicional procesión con el Santo en andas, hasta llegar a la ermita de los Pastrocillos, donde se imparte la bendición a los campos. Unas pastas, acompañadas con vino dulce, se sirven. Y por la tarde, merienda en el campo. Estos pueblos regados por el río Mesa mantienen las tradiciones en el campo y en la iglesia. Los pueblos escuchan este mes de mayo las promesas y esperanzas, los feligreses con miras puestas en el campo.
ÉPOCA DE PESCA.
Los tiempos han pasado, como el agua de nuestro río Mesa, unas veces recordando los grandes caudales que pasaron por este Valle, hasta llegar a las cascadas del Monasterio de Piedra, lugar donde en tiempos pasados un hijo de Villel fue Abad. Un recorrido de aquellos parajes que bien podemos decir que se inician desde nuestras tierras, muy especialmente visitando el Pozo Galano.
Y por estos torrentes que bordan nuestra vega y un brazo que se desvía, llamado el río Pequeño, que se adentra hasta los bordes de la plaza, divide el pueblo, situándose al lado del cerro de la Horca, unas cuantas casas habitadas principalmente en el tiempo estival, junto al Bar el Chato.
Y por estos río fresaron millones de peces y de cangrejos que hizo famoso estos pueblos, y pescadores políticos de aquellos timpos se acerdaron los domingos en busca del descanso subiendo y bajando los riales fijando la mirada en las aguas cristalinas a la espera que el cebo fuera tragado por las hermosas truchas, algunas tuertas, que formaban parte del botín del morral, que hasta Madrid llegaban, destacando a Manuel Fraga Iribarne si olvidar al Capitan General Muñóz Grandes.
No podemos olvidar, al que fue durante muchos años guarda forestal, que con gran esmero y tesón, cuidó nuestro río Mesa. Hoy al trascurrir los timpos, se hacen presentes los buenos recuerdos, que han dejado para la historia. Páginas que recuerdan la figura de Andrés Colás, hombre afable y cortés, servidor en la división Azul y más tarde servidor de nuestros ríos y montañas.
LAS TRUCHAS.
El día 1 de Abril, las cañas salieron del armario y fueron levantadas con honor, después de haber permanecido timpo en la oscuridad. Esas cañas de bambú y otras aleaciones que cimbran al haber tragado la trucha el cebo engañoso, sufrimiento y dolor pero que al pescador alegra. La canasta de mimbre se abre para echar a su presa. Y después, un gran plato cocinado por Purita Hernández, la esposa de Enrique Torrubiano.
A Enrique Torrubiano le saludé en la plaza del doctor Larrad y precisamente en el mismo lugar, que aún sigue una inscripción desde hace 138 años y que reza así: "PROHIBIDO EL PASO DE CABALLERIAS, MULTA UNA PESETA". Y en nuestra conversación nos dimos cuenta que ahora, ya no hay caballerías ni pesetas.
Nuestro pueblo ofrece muchas posibliddes, para el trabajo, familia, y ocio añadido en estos meses con la pesca, que aún no siendo tan abundantes como en el siglo pasado, lo suficiente para obligarse hacer un buen paseo entre los riales y muy conveniente para los jubilados como ahora goza, nuestro amigo Torrubiano.
Caudales de aguas bajan, crecidas por estas nuevas lluvias torrenciales. A todos nos alegraría que entre sus gotas llevaran lo que en otros tiempos, en el fondo de los ríos habitaran, aquellsas angilas, barbos, truchas, algunas tuertas y cangrejos. Aún están pendientes las buenas intenciones, y esperamos que pronto nuestro río no siga tan contaminado. <Posible depuradora en un futuro próximo>
CRÓNICA EN EL DIARIO DE NUEVA ALCARRIA, 11 de Mayo de 2007.
TIEMPO DE LABRADORES Y PESCADORES.
EL MES DE MAYO SE HA PRESENTADO EN EL VALLE CON GRAN ACTIVIDAD.
Fe y tradición se unen durante el mes de mayo para elevar oraciones. Días que van pasando, considerados como los mas largos del año, colmados de alegría por la lluvia que regaron nuestras tierras donde crecen los cereales y abunda la confianza en el tiempo para recoger las buenas cosechas.
Y la tradición. Llegar hasta la ermita de Jesús Nazareno, durante nueve días y el sábado 19, celebrar de Mañana la Eucaristía y a continuación en procesión se traslada la imagen de Jesús Nazareno a la iglesia parroquial, que permanece hasta el mes de septiembre. Nueve días que las feligresas han dedicado, este año, a dar gracias al Señor, por la lluvia enviada y en los años de sequía rogando que llegue.
Y lejos de mi infancia se unen los recuerdos en la fe con la novena <que tradicionalmente fueron conocidas por las "Flores de María">, ante la imagen de la Inmaculada, coronada de flores.
Un pueblo de labradores que hace más de 40 años viene celebrando la festividad de San Isidro Labrador y que por aquellos tiempos siendo el jefe de la Hermandad de Labradores, LIDIO OCHOA HERNANDEZ y párroco ENRIQUE HERRAN MARTÍNEZ, por primera vez fijó la fiesta en honor al patron de los labradores. El día 15 de Mayo se celebra una misa en la iglesia parroquial, siguiendo con la tradicional procesión con el Santo en andas, hasta llegar a la ermita de los Pastrocillos, donde se imparte la bendición a los campos. Unas pastas, acompañadas con vino dulce, se sirven. Y por la tarde, merienda en el campo. Estos pueblos regados por el río Mesa mantienen las tradiciones en el campo y en la iglesia. Los pueblos escuchan este mes de mayo las promesas y esperanzas, los feligreses con miras puestas en el campo.
ÉPOCA DE PESCA.
Los tiempos han pasado, como el agua de nuestro río Mesa, unas veces recordando los grandes caudales que pasaron por este Valle, hasta llegar a las cascadas del Monasterio de Piedra, lugar donde en tiempos pasados un hijo de Villel fue Abad. Un recorrido de aquellos parajes que bien podemos decir que se inician desde nuestras tierras, muy especialmente visitando el Pozo Galano.
Y por estos torrentes que bordan nuestra vega y un brazo que se desvía, llamado el río Pequeño, que se adentra hasta los bordes de la plaza, divide el pueblo, situándose al lado del cerro de la Horca, unas cuantas casas habitadas principalmente en el tiempo estival, junto al Bar el Chato.
Y por estos río fresaron millones de peces y de cangrejos que hizo famoso estos pueblos, y pescadores políticos de aquellos timpos se acerdaron los domingos en busca del descanso subiendo y bajando los riales fijando la mirada en las aguas cristalinas a la espera que el cebo fuera tragado por las hermosas truchas, algunas tuertas, que formaban parte del botín del morral, que hasta Madrid llegaban, destacando a Manuel Fraga Iribarne si olvidar al Capitan General Muñóz Grandes.
No podemos olvidar, al que fue durante muchos años guarda forestal, que con gran esmero y tesón, cuidó nuestro río Mesa. Hoy al trascurrir los timpos, se hacen presentes los buenos recuerdos, que han dejado para la historia. Páginas que recuerdan la figura de Andrés Colás, hombre afable y cortés, servidor en la división Azul y más tarde servidor de nuestros ríos y montañas.
LAS TRUCHAS.
El día 1 de Abril, las cañas salieron del armario y fueron levantadas con honor, después de haber permanecido timpo en la oscuridad. Esas cañas de bambú y otras aleaciones que cimbran al haber tragado la trucha el cebo engañoso, sufrimiento y dolor pero que al pescador alegra. La canasta de mimbre se abre para echar a su presa. Y después, un gran plato cocinado por Purita Hernández, la esposa de Enrique Torrubiano.
A Enrique Torrubiano le saludé en la plaza del doctor Larrad y precisamente en el mismo lugar, que aún sigue una inscripción desde hace 138 años y que reza así: "PROHIBIDO EL PASO DE CABALLERIAS, MULTA UNA PESETA". Y en nuestra conversación nos dimos cuenta que ahora, ya no hay caballerías ni pesetas.
Nuestro pueblo ofrece muchas posibliddes, para el trabajo, familia, y ocio añadido en estos meses con la pesca, que aún no siendo tan abundantes como en el siglo pasado, lo suficiente para obligarse hacer un buen paseo entre los riales y muy conveniente para los jubilados como ahora goza, nuestro amigo Torrubiano.
Caudales de aguas bajan, crecidas por estas nuevas lluvias torrenciales. A todos nos alegraría que entre sus gotas llevaran lo que en otros tiempos, en el fondo de los ríos habitaran, aquellsas angilas, barbos, truchas, algunas tuertas y cangrejos. Aún están pendientes las buenas intenciones, y esperamos que pronto nuestro río no siga tan contaminado. <Posible depuradora en un futuro próximo>
