VILLEL DE MESA
EL VALLE DEL MESA CUENTA CON UN NUEVO DIÁCONO, JOSÉ CARLOS HERNÁNDEZ
Recibió el nuevo grado el pasado 15 de diciembre en Tarazona.
La capital del Valle del Mesa ha terminado el año 2012 culminando las ilusiones que un día José Carlos Hernández Mártinez entregó al Señor de los Cielos con su ordenación al grado del diaconado el día 15 de diciembre.
La Catedral de Santa María de la Huerta de Tarazona nuevamente recibía ante el altar Mayor a las personas que habían sido llamadas para recibir por manos del obispo Eusebio Hernández Sola el orden diaconal, revestidos con la estola y dalmática. Como concelebrantes acudieron el párroco del Vallel del Mesa, Enrique Herranz y del pueblo de Sisamón, perteneciente ese último a la Diócesis de Tarazona.
El villelero estuvo acompañado por sus familiares, amigos y representantes de la familia franciscana la que pertenece como franciscano seglar, como el padre Isaac Moreno y la hermana Marina.
El villelero asegura que las motivaciones que le llevaron a ordenarse fueron varias. "La primera y principal, la de consagrar mi vida al servicio de Cristo y de su Iglesia, predicando el evangelio y atendiendo al bien de mis hermanos". Esta inquietud, comenta, "ha estado siempre presente" y, aunque parece que algunas veces se escondía, siempre volvía a aparecer o resurgir con más fuerza."
El nuevo diácono explica que ha sido algo "innato" en él y recuerda las palabras del profeta Jeremías, "antes que te formaras en el vientre de tu madre, yo ya te conocía, te consagré y te nombré profeta de los gentiles".
José Carlos Hernandez reconoce que se trata de unas palabras que cualquiera "nos vienen grandes y nos dan hasta miedo", pero cuando se siente la llamada de Cristo y se recibe la gracia del sacramento del orden, "también se hace grande la confianza en Dios que todo lo puede, a pesar de nuestra pequeñez y nuestra debilidad", subraya.
José Carlos Hernández comenzó a estudiar Teología a distancia, ya que no podía permitirse el "lujo" de dejar de trabajar. Luego se trasladó a estudiar al Centro Regional de Estudios Teológicos de Aragón, en Zaragoza, donde tuvo como profesor de varias asignaturas y tutor, al hoy obispo de Huesca Julián Ruíz Martorell.
Después, el Señor se valió de una enfermedad, de la que ya estoy muy recuperado, que me impide realizar mi trabajo en un parque eólico de la provincia de Guadalajara, para llevarme al Seminario de Tarazona, donde seguí con mis estudios y vida de oración, junto con mi tratamiento médico. Y así llegó el día 15 de diciembre de 2012", reflexiona.
Desde el año 2001 hace celebraciones de la palabra y da la sagrada Comunión, con licencia del obispo de Sigüenza-Guadalajara y la dirección del párroco Enrique Herranz en Villel de Mesa y en los anejos como Mochales, Amayas, Algar de Mesa y Sisamón, este último perteneciente ya a la Diócesis de Tarazona, aunque regido por el mismo párroco.
Su ingreso en el seminario se lo debe a Jesús Martinez Cabello, en aquella época párroco de Nuévalos (Zaragoza), a Raúl Romero y al señor obispo, don Eusebio, "que me acogió con los brazos abiertos y siempre se ha mostrado como un verdadero padre para mi", considera. No quiere olvidarse de Javier Calvillo, el rector "que tanto apoyo me ha dado en los momentos difíciles, que siempre los hay", concluye.
José Carlos estará ejerciendo el ministerio del diaconado por un tiempo más largo de lo corriente por motivos personales, aunque asegura estar abierto "a la recepción del presbiterado cuando se la voluntad del Señor".
(Crónica en Nueva Alcarria 4 de Enero 2013, página 30 Pueblo a Pueblo) Cronista del Valle del Mesa. P. Larrad Pérez
EL VALLE DEL MESA CUENTA CON UN NUEVO DIÁCONO, JOSÉ CARLOS HERNÁNDEZ
Recibió el nuevo grado el pasado 15 de diciembre en Tarazona.
La capital del Valle del Mesa ha terminado el año 2012 culminando las ilusiones que un día José Carlos Hernández Mártinez entregó al Señor de los Cielos con su ordenación al grado del diaconado el día 15 de diciembre.
La Catedral de Santa María de la Huerta de Tarazona nuevamente recibía ante el altar Mayor a las personas que habían sido llamadas para recibir por manos del obispo Eusebio Hernández Sola el orden diaconal, revestidos con la estola y dalmática. Como concelebrantes acudieron el párroco del Vallel del Mesa, Enrique Herranz y del pueblo de Sisamón, perteneciente ese último a la Diócesis de Tarazona.
El villelero estuvo acompañado por sus familiares, amigos y representantes de la familia franciscana la que pertenece como franciscano seglar, como el padre Isaac Moreno y la hermana Marina.
El villelero asegura que las motivaciones que le llevaron a ordenarse fueron varias. "La primera y principal, la de consagrar mi vida al servicio de Cristo y de su Iglesia, predicando el evangelio y atendiendo al bien de mis hermanos". Esta inquietud, comenta, "ha estado siempre presente" y, aunque parece que algunas veces se escondía, siempre volvía a aparecer o resurgir con más fuerza."
El nuevo diácono explica que ha sido algo "innato" en él y recuerda las palabras del profeta Jeremías, "antes que te formaras en el vientre de tu madre, yo ya te conocía, te consagré y te nombré profeta de los gentiles".
José Carlos Hernandez reconoce que se trata de unas palabras que cualquiera "nos vienen grandes y nos dan hasta miedo", pero cuando se siente la llamada de Cristo y se recibe la gracia del sacramento del orden, "también se hace grande la confianza en Dios que todo lo puede, a pesar de nuestra pequeñez y nuestra debilidad", subraya.
José Carlos Hernández comenzó a estudiar Teología a distancia, ya que no podía permitirse el "lujo" de dejar de trabajar. Luego se trasladó a estudiar al Centro Regional de Estudios Teológicos de Aragón, en Zaragoza, donde tuvo como profesor de varias asignaturas y tutor, al hoy obispo de Huesca Julián Ruíz Martorell.
Después, el Señor se valió de una enfermedad, de la que ya estoy muy recuperado, que me impide realizar mi trabajo en un parque eólico de la provincia de Guadalajara, para llevarme al Seminario de Tarazona, donde seguí con mis estudios y vida de oración, junto con mi tratamiento médico. Y así llegó el día 15 de diciembre de 2012", reflexiona.
Desde el año 2001 hace celebraciones de la palabra y da la sagrada Comunión, con licencia del obispo de Sigüenza-Guadalajara y la dirección del párroco Enrique Herranz en Villel de Mesa y en los anejos como Mochales, Amayas, Algar de Mesa y Sisamón, este último perteneciente ya a la Diócesis de Tarazona, aunque regido por el mismo párroco.
Su ingreso en el seminario se lo debe a Jesús Martinez Cabello, en aquella época párroco de Nuévalos (Zaragoza), a Raúl Romero y al señor obispo, don Eusebio, "que me acogió con los brazos abiertos y siempre se ha mostrado como un verdadero padre para mi", considera. No quiere olvidarse de Javier Calvillo, el rector "que tanto apoyo me ha dado en los momentos difíciles, que siempre los hay", concluye.
José Carlos estará ejerciendo el ministerio del diaconado por un tiempo más largo de lo corriente por motivos personales, aunque asegura estar abierto "a la recepción del presbiterado cuando se la voluntad del Señor".
(Crónica en Nueva Alcarria 4 de Enero 2013, página 30 Pueblo a Pueblo) Cronista del Valle del Mesa. P. Larrad Pérez